En febrero de 1985 la Asamblea General de la ONU, Organización de las Naciones Unidas, resolvió dedicar este día a homenajear a aquellas personas que, por propia voluntad y sin percibir remuneración alguna, dedican su tiempo y esfuerzos a acciones solidarias y altruistas en instituciones orientadas a mejorar la calidad de vida de millones de personas.
Para generar una conciencia solidaria es importante estimular la capacidad de acción y transformación que individual y colectivamente todos pueden ejercer.
La Unesco, Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, reconociendo la importancia que el voluntariado ha ido cobrando a nivel mundial, asociado principalmente al desarrollo de las organizaciones no gubernamentales o sector social, invita a los gobiernos y a todos los sectores de la sociedad a apoyar este importante trabajo, dando cabida a las diversas expresiones culturales.
La Asamblea General declaró asimismo al año 2001 como “Año Internacional de los Voluntarios”.