Este miércoles Alberto Fernández se reunirá con los referentes del campo en una semana de cruces de declaraciones
El presidente Alberto Fernández recibirá este miércoles a dirigentes de la Comisión de Enlace agropecuaria, en medio de la tensión por la posibilidad de que se incrementen las retenciones a las exportaciones del sector y se apliquen cupos a las ventas externas de granos, para frenar el alza de los alimentos.
A la reunión -prevista para las 15.30 en Casa Rosada- fueron convocados los presidentes de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Carlos Iannizzotto; Confederaciones Rurales (CRA), Jorge Chemes; Federación Agraria (FAA), Carlos Achetoni; y Sociedad Rural (SRA), Daniel Pelegrina.
La tensión comenzó cuando la semana pasada la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca, deslizó que el Gobierno podría analizar una suba de retenciones a las exportaciones agropecuarias, para frenar el incremento de precios en los alimentos.
El presidente de CRA sostuvo ante esas declaraciones que «para un sector del Gobierno, el campo es el enemigo», al rechazar la posibilidad de que se incrementen los derechos de exportación.
«Se busca un escenario de conflicto, porque de alguna manera se quieren tapar problemas importantes que atraviesa el país», enfatizó Chemes.
A nivel técnico, el consultor en temas de agro Pablo Adreani estimó que el 3% de retenciones al maíz equivale a 7 dólares la tonelada. Quedan 17 millones de toneladas por vender. Al Gobierno le ingresarían 119 millones de dólares. Es ingenuo pensar que con esta acción pueda bajar el precio de alimentos. Estos suben por otros factores, como por ejemplo el aumento de naftas».
También sugirió una solución: «El campo puede decirle al Gobierno: ´colaboramos con el 3% de suba de retenciones al trigo y maíz y esperamos que no intervenga los mercados y no cierre las exportaciones´».
Antes de pedirle la audiencia al Presidente, la Comisión de Enlace salió al cruce de declaraciones del jefe de Estado y ratificó que la actividad productiva del campo «no es formadora de precios».
Actualmente las exportaciones de soja están gravadas en 33%, y para subirlas se requiere el voto del Congreso.
El presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Horacio Salaverri, dijo que el Gobierno es «socio del campo, porque si sube el precio de la soja por arrastre del valor internacional, también tiene un alza la recaudación fiscal».
El trigo y el maíz pagan 12% de retención y podrían subirse hasta 15% por decreto.
En diciembre de 2019, el Congreso aprobó la ley de Solidaridad Social y reactivación Productiva, instrumento que le permite incrementar los derechos de exportación.
El aumento de retenciones o cupos de exportación son «dos medidas devastadoras para la producción», sostiene la dirigencia del agro.
Según pudo saber la agencia Noticias Argentinas, la Comisión de Enlace insistiría ante Fernández con la baja de los impuestos, ya que el 21% del IVA perjudica a la producción.
«Nuestra actividad incide ínfimamente en el precio final de los alimentos. En su composición impactan muchísimo más los costos provenientes de otros eslabones de la cadena y, sobre todo, del Estado, a través de los impuestos y tributos», dijo la Comisión de Enlace.