Política y Economía

El Gobierno busca prorrogar por decreto la ley de biocombustibles


El director ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno, Claudio Molina, anticipó que "sería de necesidad y urgencia, para extenderla, abriendo un plazo para la negociación"

El Gobierno se dispone a prorrogar por decreto, al menos por entre 60 o 90 días, la ley de Biocombustibles, ya que vencerá la semana próxima y no hay tiempo para que el Congreso sancione otra norma.

Así trascendió hoy entre círculos empresariales con llegada a distintos legisladores y a dependencias gubernamentales.

Claudio Molina, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno (AABH), confirmó a la agencia NA que se viene una prórroga.

«Tenemos información de que el Poder Ejecutivo emitirá un decreto, que sería de necesidad y urgencia, para extender la ley, abriendo un plazo para la negociación», indicó Molina.

En tanto, fuentes del sector azucarero se expresaron en el mismo sentido al ser consultadas: «La prórroga por decreto es lo más probable. No hay otra alternativa, porque no se puede caer en un vacío legal», dijeron al ser consultadas por NA.
El 12 de mayo próximo vence la ley de biocombustibles a nivel nacional.

Pese a tener media sanción del Senado para su prórroga, aún no hay acuerdo en la Cámara de Diputados.
La Ley es la 26.093, denominada «Régimen de Regulación y Promoción para la Producción y Uso Sustentables de Biocombustibles», y es clave para la política petrolera, y también para los ingenios azucareros.
Actualmente está dispuesta la mezcla de biodiésel de soja en el gasoil (10%) y del etanol de caña y maíz en las naftas (12%).

Si el plazo vence y no se prorroga la legislación, las petroleras no comprarían más biocombustibles, por lo que no sería necesario producirlos, con el consiguiente cierre y despido del personal, alertan desde el sector.

El biodiésel argentino genera unos 300.000 empleos, entre directos e indirectos.

La discontinuidad de la ley no solo generaría un enorme daño a las economías de provincias productoras, con pérdida de miles de puestos de trabajo, sino que impactaría sobre inversiones por miles de millones de dólares realizadas en los últimos 15 años.

Los defensores de la norma sostienen que el corte obligatorio establecido en la ley 26.093 de naftas y gasoil con biocombustibles contribuye a la sostenibilidad ambiental, al reducir las emisiones de gases de efecto invernadero causantes del calentamiento global.

En la Argentina hay más de 54 plantas productoras de biocombustibles, radicadas en diez provincias.

La provincia de Santa Fe concentra un 82% (18 plantas) de toda la capacidad productiva de biodiesel del país, principalmente en la zona del Gran Rosario.