El seleccionado masculino de vóley no pudo con su par francés en la semifinal y ahora deberá jugar por el tercer lugar de los Juegos Olímpicos
La Selección argentina masculina de voleibol no pudo esta mañana con el implacable trabajo de Francia, que la superó por 3 sets a 0 en las semifinales de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y la llevó a jugar por el bronce en el clásico sudamericano ante Brasil, el próximo sábado.
Francia manejó y dominó el partido en el estadio del parque Ariake desde su concentración defensiva y los casi nulos errores en ataque, con porcentajes altos de recepción desde donde construyó su juego.
La victoria final fue con parciales de 25-22, 25-19 y 25-22, con Facundo Conte como máximo anotador de un equipo albiceleste que no se puede reprochar nada, porque tuvo enfrente a un rival que lo maniató y no le dejó desplegar el juego que lo había llevado por tercera vez en su historia a las semifinales olímpicas.
Pero como ocurrió en esas anteriores oportunidades (Seúl 1988 y Sidney 2000), no pudo cruzar esa instancia y peleará por el bronce en el clásico sudamericano contra el «cuco» Brasil, que tropezó en su intención de repetir el título olímpico de Río 2016 contra Rusia (1-3).
Argentina, que en Seúl se subió al último lugar del podio, intentará repetir ese hito deportivo el próximo sábado a partir de la 1:30 (hora argentina).
Los méritos de Francia y los errores de Argentina se complotaron para dejar la tristeza y la decepción del lado del conjunto albiceleste, que en la fase de grupos había superado a los galos por 3-2.
Desde un inicio, con un Clevenot muy potente en la punta, Francia fue construyendo su diferencia, dentro de un trámite parejo, en el que Argentina llegó a estar 21-20 gracias a un Bruno Lima imparable. Pero el saque de los galos cerró mejor y le permitió quedarse con el primer parcial.
En el segundo set, Francia continuó con su nivel superlativo en defensa, contragolpe y bloqueo para despegarse 8-5 con mayor protagonismo de Ngapeth, algo que frustraba a los argentinos, que empezaron a aumentar los errores, lo que le permitió sacar máxima diferencia a los europeos (19-13) y también cerrar de su lado ese parcial.
El tercero arrancó de la misma manera, con Patry lastimando en saque y ataque para adelantar a Francia (6-2), aunque desde los cambios de Méndez (como el ingreso de Poglajen por Palacios) la Selección empezó a encontrar un juego más fluido, que lo devolvió al partido para empatar en 18 puntos.
Pero el desenlace, Francia volvió a tener un bloqueo que fue un muro y así lo cerró 25-22, para llegar a la final olímpica por primera vez, cuando hasta el momento tenía un octavo puesto como mejor posición.
Argentina, como hace 33 años, jugará por la medalla de bronce ante Brasil.