Tras el escándalo a nivel nacional, CLG averiguó cómo está la situación en Santa Fe y quiénes han sido vacunados hasta el momento
Tras el escándalo de las vacunaciones VIP, que tuvo enormes repercusiones y consecuencias (Alberto Fernández le terminó pidiendo la renuncia al ministro Ginés González García), comienzan a aparecer situaciones vinculadas a la vacuna que generan alarma y preocupación: estiman que en la región hay un 30 por ciento del personal de salud que aún no está vacunado contra el coronavirus. En la aplicación de las dosis disponibles, aún no aparecen los docentes que, en teoría, iban a ser incorporados en los grupos prioritarios; ni los adultos mayores, que recién empezó esta semana.
Un allegado al sistema de Salud le confió a CLG que sólo un 60 o un 70 por ciento de los trabajadores recibió la dosis. «Van a empezar con los mayores de 70 años y todavía hay gente de salud a la que no llamaron para la vacuna», indicó la fuente.
Entre otras cosas, mencionó que hay trabajadores que se encuentran licenciados por distintos problemas de salud o porque son alcanzados por el Decreto de Necesidad y Urgencia, ya que se encuentran dentro de lo que se conoce como «población de riesgo», a los que nunca han llamado para la vacuna. «En ese grupo hay médicos, enfermeros y psicólogos, entre otros», confiaron a este medio.
«Hay gente que tiene que estar insistiendo, de lo contrario no la llaman. Hay un descontrol y falta un ordenamiento con respecto a este tema», sentenció. Por otro lado, comentó también que se ha vacunado a «un montón» de gente que no correspondía.
En el último tiempo se supo que muchos funcionarios tanto provinciales como municipales, se han vacunado sin ser personal esencial. Incluso, algunos han justificado la vacunación con razones realmente lamentables.
CLG también dialogó con Pablo Crispo, secretario gremial de la Asociación de Médicos de la República Argentina de Rosario. Según explicó, el número general de vacunados a nivel provincial «ronda el 70 por ciento».
«Lo que falta son, sobre todo, pueblos del interior y personal que se desempeña de forma autónoma, que no trabaja en grandes hospitales ni sanatorios», destacó. Y también señaló que «algunos quedaron relegados porque tenían alguna comorbilidad y estaba contraindicada la vacuna hasta hace poco, pero ahora ya pueden vacunarse».
Crispo contó que en la provincia «personal de salud que estaba comprendido, pero no estaba tan expuesto se vacunó antes que otros más expuestos». «Creo que debería haber existido más control a ver a quién les tocaban», añadió. Además, explicó: «La cantidad de vacunas que se esperaban era mucho mayor a las que están llegando. Recién ahora parece que a lo mejor hay un poco más de fluidez».
«Lo que está pasando en el Ministerio de Salud de la Nación es una vergüenza. Que haya existido una vacunación en paralelo es inaceptable», remarcó. Y cerró: «Que hayan vacunado a personal de obras sociales que hace tareas administrativas o a familiares que no tienen ningún grupo de riesgo es inaceptable».
Hace ya algunas semanas, el periodista Luis Rodrigo había revelado en el diario El Litoral que al menos 30 empleados del Instituto Provincial de Estadísticas y Censos de Santa Fe (IPEC) recibieron la primera dosis, fuera de cualquier protocolo de preferencias. En esa misma línea, se supo que en Arroyo Seco hubo varios miembros del gabinete municipal que antes de entregar las dosis a centros vacunatorios se las habían aplicado.
Este manejo de las vacunas disponibles, que distan en número de las que se habían proyectado, dejó relegado, por ejemplo, al personal de la educación, que puso como condición la vacunación docente y no docente para reiniciar el ciclo lectivo presencial. También quedaron más atrás en la lista los adultos mayores, que recién a partir de este lunes pueden inscribirse para ser inoculados y deberán esperar que les asignen los turnos por orden de prioridad. Siempre sujeto a las dosis que vayan llegando al territorio santafesino.
En cuanto a la vacunación de personal no esencial que se filtró en los últimos días, algunos profesionales del área de salud remarcaron: «Justifican el privilegio de la vacunación diciendo que se visitan hospitales. Entonces, ¿qué nos queda a nosotros que vivimos aquí y exponemos nuestra vida?».
Este lunes, la ministra de Salud de Santa Fe, Sonia Martorano, indicó que «las vacunas ya están para los centros de salud». Según destalló, el miércoles pasado llegaron 30.000 dosis y el pasado fin de semana pudieron sumar 10.000 más que alcanzan para cubrir lo que faltaba en el área de salud.