Será el próximo lunes y el avión partirá e Tel Aviv y estará operado por la aerolínea israelí El Al, confirmó Autoridad Aeroportuaria de Israel
El primer vuelo comercial de la historia entre Israel y Emiratos Árabes Unidos (EAU) será este lunes, cuando una delegación de altos cargos israelíes y de Estados Unidos -entre ellos Jared Kushner, yerno del presidente Donald Trump- visiten Abu Dabi en un viaje simbólico para impulsar la normalización de relaciones con el país árabe.
El vuelo partirá de Tel Aviv y estará operado por la aerolínea israelí El Al, confirmó Autoridad Aeroportuaria de Israel a la agencia EFE.
El código del vuelo es LY971, un guiño a los tres números que forman el código internacional para llamar a EAU desde el extranjero y, según medios locales, se prevé que el avión regrese a Tel Aviv el martes.
Desde el anuncio de la normalización de relaciones el 13 de agosto pasado, ambos países estrenaron una comunicación telefónica directa, empresas israelíes y emiratíes firmaron un acuerdo para investigar el coronavirus y se fueron firmando diversos contactos oficiales entre sus autoridades.
La delegación israelí que visitará Abu Dabi estará encabezada por el asesor de Seguridad Nacional, Meir Ben Shabat, y contará con altos cargos de los Ministerios de Defensa y Asuntos Exteriores.
Estarán acompañados por un importante equipo estadounidense liderado por Kushner, asesor y yerno del presidente estadounidense, Donald Trump, y en el que también figurará el enviado especial para Oriente Medio, Avi Berkowitz, y el asesor de seguridad nacional, Robert C. O’Brien.
En el encuentro con las principales autoridades emiratíes en Abu Dabi, tratarán sobre el establecimiento de lazos en ámbitos como economía, relaciones comerciales, negocios, tráfico aéreo o turismo.
Con la normalización de los lazos, EAU se convirtió en el tercer país árabe en establecer relaciones diplomáticas plenas con Israel, después de Egipto (1979) y Jordania (1994), mientras que Tel Aviv quiere aprovechar el momento creado para extender lo ocurrido a otros países árabes y conseguir una normalización con el golfo Pérsico, y uno de los primeros en la lista sería Barhéin.
El liderazgo palestino condenó este acercamiento al considerarlo «una traición» a su causa por el reconocimiento de un Estado propio y anunció el retiro de su embajador en los EAU