El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, se metió en la polémica que se generó el pasado jueves en la Cámara de Diputados de la provincia cuando comenzó a debatirse el proyecto para extender el Plan Abre a todos los municipios santafesinos, que finalmente se aprobó.
Los diputados del PJ decidieron levantarse de sus bancas y retirarse del recinto cuando el Frente Progresista se disponía a tratar el tema. Y sacaron un comunicado afirmando que «el oficialismo está incurriendo en este tipo de prácticas políticas buscando condicionar al futuro gobierno”.
Lifschitz se mostró sorprendido por las críticas del PJ y recordó que «el proyecto que surgió en el Senado y no es del socialismo”. A lo que agregó: “Tuvo voto unánime de los 11 senadores del Justicialismo y fue con media sanción a Diputados”.
En este marco, algunos senadores justicialistas, e incluso socialistas, consultados por CLG prefirieron guardar silencio y no hablar del tema.