El vicepresidente de Brasil, general Hamilton Mourao, afirmó este miércoles que el régimen de facto que gobernó 21 años el país no fue una «dictadura» y sí un gobierno autoritario de una década.
La declaración de Mourao parece contraponerse a la posición del presidente Jair Bolsonaro, quien reivindica a la dictadura de 1964 a 1985 y defiende la tortura ejercida por el régimen de los generales.
«En 1964 hubo otra ruptura, en el marco de la Guerra Fría y el movimiento comunista internacional. Cayó el gobierno del presidente Joao Goulart y
entramos en aquel periodo que algunos llaman de dictadura militar. Yo prefiero llamar de gobierno de presidentes militares. Fue un gobierno
autoritario por diez años», dijo Mourao.
Citó el Acto Institucional 5 de 1967 que oficializó la censura, la persecución política y prohibió la actividad partidaria no autorizada, que
generó miles de exiliados, unos 8.000 torturados y más de 400 desaparecidos.