Cerca de un centenar de los casi 1.000 migrantes hondureños que partieron en una nueva caravana de su país el miércoles iniciaron en la frontera con Guatemala la gestión para pedir refugio en México, informó este jueves una funcionaria guatemalteca.
Alejandra Mena, vocera del Instituto Guatemalteco de Migración, dijo a periodistas que un primer grupo de migrantes de la caravana se encontraba en el paso fronterizo de Ciudad Tecún Umán, un poblado en el suroeste guatemalteco.
En Tecún Umán «ya se encuentra un grupo de migrantes hondureños a la espera de realizar controles migratorios para poder salir de Guatemala e ingresar a México», precisó Mena.
«Migración de Guatemala destacó a un grupo de personas hacia esa delegación para asistir a estos grupos de migrantes y así tener una migración ordenada, segura y regular. Tenemos conocimiento que (en México) van a recibir las solicitudes de refugio y debemos esperar la resolución de las mismas», agregó.
Los hondureños partieron en autobuses y a pie entre la noche del martes y el amanecer de este miércoles desde San Pedro Sula (norte) con la intención de llegar a Estados Unidos, emulando caravanas anteriores que desde octubre del año pasado salieron para huir de la pobreza y la violencia.
La mayoría de integrantes de las caravanas anteriores optaron por obviar el paso legal y cruzaron el río Suchiate que divide a Guatemala con México, algunos a nado y otros en precarias balsas construidas con cámaras de neumáticos y tablas de madera. En esas ocasiones, previo a cruzar, varios migrantes pasaron varios días hacinados en el puente internacional que une los dos países, mientras que otros pernoctaron en la pequeña plaza de Tecún Umán.
Los éxodos masivos de migrantes hondureños, a los que se han unido guatemaltecos y salvadoreños, han provocado el malestar de Estados Unidos. El presidente Donald Trump inició un proceso para retirar la ayuda financiera a Guatemala, Honduras y El Salvador por no evitar la salida de caravanas.