Mundo

Una escuela estadounidense posee una sala que aterroriza a los niños


Se trata de un área en la que los mantienen encerrados. A través de la denuncia de una familia, se conocieron varios casos de violencia y abuso

Se trata de un área en la que los mantienen encerrados. A través de la denuncia de una familia, se conocieron varios casos de violencia y abuso

Tras el relato aterrado de un nene de siete años a su familia, comenzó una investigación sobre un área de confinamiento de menores en una escuela estadounidense. Se trata de la Escuela Gages Lakes, ubicada en el norte de Chicago, una institución terapéutica para niños con dificultades emocionales y de conducta.

Staley Sandy-Ester es un niño de siete años que disfruta de jugar y leer, de usar la computadora y se interesa por los robots. Tiene un diagnóstico de trastorno de déficit de atención con hiperactividad. Sin embargo, no le agrada en lo más mínimo una sala de la escuela. Ante la repetición de eso, su madre indagó en el tema y llegó a un video que la preocupó sobremanera.

A partir de haber visto el video, realizaron una denuncia y comenzó una investigación sobre el caso, que implicó la separación de dos asistentes escolares, sospechados de abusos contra ocho menores de entre 7 y 9 años.

La investigación es llevada adelante por ProPublica y el periódico Chicago Tribune y cuestiona cómo las escuelas en el estado de Illinois han usado el aislamiento.

El video muestra la sala de confinamiento individual en la cual solían poner a Staley y a otros niños y niñas. ProPublica describió: “Se ve al niño tratando de salir de la sala mientras una asistente escolar, sentada en una silla con ruedas, bloquea la entrada. En un momento la asistente inmoviliza una muñeca de Stanley contra la pared. Él se enoja cada vez más y la patea. Entonces ella se levanta, lo alcanza, le quita un pedazo de papel doblado de la mano y lo empuja contra otra pared”.

Tras analizar gran cantidad de grabaciones de esa área de la escuela, iniciaron “21 investigaciones sobre abusos en una escuela que puso en aislamiento a los estudiantes más de 1.700 veces el último periodo escolar”.

Además, denunciaron que ocho niños, incluido Staley, “podrían haber sufrido abusos durante un mes”. En este marco, dos asistentes escolares, Nicholas Izquierdo y Jennifer Aguirre, renunciaron. Izquierdo enfrenta acusaciones penales: “Los fiscales del condado de Lake alegan que utilizó fuerza excesiva contra los estudiantes. Su abogado niega que haya cometido delitos”, según el informe.

Aguirre, quien había trabajado en la escuela durante 18 años, se suicidó en agosto al saber que investigaban su conducta. Los cinco casos contra ella se estimaron infundados. Otros ocho casos involucran a varios miembros del personal de Gages Lake y los ocho restantes, a Izquierdo.

Si bien la familia de Staley sólo tiene copia de los 90 segundos que difundió, pudo ver otros videos “que muestran cómo su hijo sufre abuso físico” o es encerrado con llave en una habitación sin ningún tipo de supervisión adulta.

La investigación de ProPublica y el periódico de Chicago hizo que la Junta de Educación del Estado de Illinois haya propuesto esta semana nuevas reglamentaciones que prohibirían completamente la práctica del confinamiento solitario de niños. Por el momento, hasta que encuentren una institución educativa en la que puedan volver a confiar, los padres de Staley han optado por educarlo en la casa.