“Arcoiris” es un espacio que surgió, como tantos otros en los barrios, para asistir a los vecinos de Lavalle al 4300. Su referente contó a CLG sobre su tarea y explicó cómo colaborar con ellas para que sigan adelante con la iniciativa solidaria
Por Diego Carballido
Una historia que se reitera en los últimos meses en los barrios carenciados de la ciudad es la organización frente a la necesidad. En general, son mujeres, madres muchas de ellas, quienes deciden reaccionar frente al aumento de los pedidos de ayuda de sus propios vecinos.
De esa manera surgió el comedor Arcoiris, sostenido por unas diez mujeres de la zona sudoeste, en Lavalle 4350. En diálogo con CLG, su referente, Leidi Cuevas explicó cómo surgió el espacio, a quiénes ayudan y cómo es la realidad que les toca transitar, semana a semana, en estos tiempos atravesados por la pandemia.
«Somos entre 7 y 10 mujeres que, al ser todas mamás, de alguna manera buscamos la forma de conseguir las cosas para armar los lunes y miércoles una merienda, y los viernes la comida. Nuestro maridos también nos ayudan mucho porque son los que se quedan con nuestros hijos», dijo Cuevas, que participa de la tarea solidaria junto con vecinos y sus propias hermanas.
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“La merienda la preparamos para unas 150 familias y cuando hacemos comida suelen venir unas 200”, contó la mujer, que es madre de tres hijos. «También tenemos un roperito solidario donde juntamos la ropa que nos van donando y a la hora de la merienda la ponemos a disposición, para que quienes la necesiten se la puedan llevar”, explicó.
“Ahora lo que más se necesitan son frazadas por el frío y sobre todo leche, que es lo que más utilizamos por la gran cantidad de chicos que vienen», pidió la mujer.
“Arcoiris” se sostiene mediante la ayuda del Banco de Alimentos Rosario y por el aporte que realizan las propias familias del barrio, con lo que logran hacerse de los alimentos que luego distribuyen como raciones de comida. «Seguiremos poniendo el pecho porque vemos que la gente necesita de la ayuda y en el barrio se vive gracias al día a día de aquellos que salen a cirujear o cartonear», aseguró la referente.
El merendero funciona a pesar de las inclemencias del tiempo, ya que cocinan al aire libre., y porque la gente va «siempre a preguntar si vamos a dar algo, ya que lo necesita», sin importar cómo este el día, explicó la mujer quien compartió con alegría que han podido organizar un festejo por el día de las infancias donde pudieron repartir presentes para unos 1.000 chicos del barrio, teniendo en cuenta todos los cuidados de distanciamiento que requieren las normas sanitarias por el coronavirus.
«Fue algo inexplicable y muy importante para nosotros, porque era la primera vez que organizábamos algo así y estuvimos varias semanas preparándolo. Siempre teniendo presente todas las normas de seguridad y muy atentos a los cuidados, con distancia social y barbijos. Fue algo muy lindo donde colaboraron muchas mamás del barrio”, indicó.
Para colaborar con Arcoiris se puede llamar al teléfono 341-2577198 o comunicarse a través de sus redes sociales. “Todo nos ayuda”, concluyó Cuevas.