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Un equipo femenino de ciclismo cuyo objetivo no es sólo ganar


Un equipo femenino de ciclismo, el «Shimano Ladies Power», tuvo un 2017 de ensueño con grandes resultados, pero para este 2018, mantiene la apuesta por la mujer y el desarrollo de jóvenes, sumado a la inclusión de una corredora de la competencia adaptada.
La temporada comenzó ratificando valores en la Vuelta a San Juan, competencia internacional top que heredó la provincia tras la baja del Tour de San Luis.
Cuatro «ladies» estuvieron presentes y Antonella García, la Junior top, dio la primera alegría al imponerse en la categoría Juvenil.
En la prueba inclusiva, el Shimano Ladies Power, por sus principios, dijo presente con una de sus figuras, Mariela Delgado, de 31 años y nacida en Misiones, que es figura del ciclismo adaptado.
Nacida con un trastorno de plexo braquial, lesión nerviosa que le genera una restricción de la fuerza en el brazo derecho, la ciclista compitió en ciclismo convencional hasta 2013 y luego pasó a adaptado hasta ser subcampeona mundial.
«No fue una carrera, lo más importante es que semejante competencia internacional sea inclusiva y por primera vez le otorgue un lugar al ciclismo adaptado», aseguró Delgado.
También estuvieron otras dos Ladies: Micaela Barroso (20 años) y Maribel Aguirre (18), dos de las joyas del equipo, intervinieron en tándem con chicas no videntes.
En 2017, el equipo compitió en 54 carreras, con 58 podios, 55 victorias, 78 entre los top 10, 15 victorias en una gira por Estados Unidos y 20 medallas en torneos nacionales.
Este equipo femenino de ciclismo, el único latinoamericano que compitió en el máximo nivel mundial, está compuesto por 13 mujeres (de 4 países) y con base en la Argentina.
Sin embargo, pese a este sorprendente éxito, en este 2018 se tuvo que achicar el presupuesto, se fueron tres figuras (sobre todo la top, la cubana Marlies Mejías) y el equipo ya no tendrá licencia UCI (dependerá de invitaciones porque resignó su plaza en la máxima categoría), aunque intentará mantener un calendario exigente y, sobre todo, los ideales de un proyecto que apuesta a la mujer y a desarrollar el talento joven.
«Vamos a reorientar los esfuerzos económicos y enfocarnos en las bases. El objetivo es volver a las fuentes, sacar talentos, desarrollarlos e introducirlos en otro nivel, como pasó con Marlies. Queremos seguir compitiendo lo más alto que podamos con chicas con potencial», explicó Nicolás Muszkat, el mentor del team.
«Apuntaremos más a las Juniors, como Antonella García, que correrá en los Juegos de la Juventud, y seguramente reclutaremos un par más como ella», detalló Verónica Martínez, la manager del equipo.
Se viene una temporada distinta a la anterior, sin pensar tanto en los resultados, pero con los objetivos de siempre: invertir en los jóvenes y en el talento femenino. El éxito pensado desde otro lugar.