CLG dialogó con el delegado de Amsafe Rosario sobre el relevamiento de la situación epidemiológica que realizan en las escuelas
Amsafe Rosario y ATE Rosario llevan adelante un plan de relevamiento sobre la situación epidemiológica de las escuelas de Rosario. Cada semana, gracias a datos recopilados por los delegados de cada institución, se actualiza información correspondiente a cantidad de aislados y casos. CLG dialogó con Gustavo Teres, de Amsafe, para conocer un poco más sobre esta decisión.
En primera instancia, aseguró: «Lo que vamos sabiendo es un crecimiento sostenido y muy importante de la cantidad de burbujas aisladas que hay en las escuelas y de los niveles de contagio que existen». «Nosotros partimos en un primer estudio con un 20 por ciento de casos, hace unos 20 días, y ahora estamos en un 50 por ciento de casos en las escuelas», especificó.
El docente remarcó que es «una proyección que acompaña lo que pasa en la ciudad». «Hay que entender que la escuela no está por fuera de eso. Cuando se activa, se moviliza un tercio de la población», señaló. Y agregó: «No es solo la vida al interior de la escuela, también está el transporte, la espera en al puerta».
Teres no quiso dejar de aclarar que hay «un esfuerzo muy grande de los equipos directivos y los docentes por cuidar la salud», pero confesó que «muchas veces eso no alcanza». «No es que los contagios necesariamente se dan en la escuela, pero se pueden transmitir. Es muy difícil que no haya en algún momento contacto entre los niños», explicó.
El delegado de Amsafe Rosario indicó: «Nosotros estamos planteando un cierre preventivo, junto con otras actividades. Si cerráramos solo las escuelas no sería suficiente. Igual que si cerramos otras cosas y no las escuelas. Hay que plantear un confinamiento severo».
Ante la no restricción de la presencialidad en el anuncio del miércoles del gobernador de Santa Fe, aseveró: «Me parece que es un error del gobierno que no mide la complejidad, tenemos la mitad de la provincia en rojo. Todos los sistemas educativos del mundo, cuando entran en el semáforo en rojo, suspenden las clases».
«Hay un Estado que no tiene políticas públicas. Debería estar testeando miles de personas todos los días, que debería estar evaluando centeneras de alumnos en todas las escuelas», declaró Teres. Y en esa misma línea detalló el por qué del relevamiento que están realizando: «Entendemos que tenemos la responsabilidad de cuidar nuestras condiciones de trabajo. Este conocimiento también nos sirve para intervenir en el debate y en los reclamos que tenemos que hacerle a un Estado muy ausente».