CLG dialogó con el dueño de una conocida tabaquería rosarina sobre el sustituto del cigarrillo industrial
El cigarrillo es uno de los tantos vicios que tienen muchas personas, pero en los últimos años se ha transformado en un lujo para el argentino. Los precios de los cigarrillos industriales se dispararon hacia las nubes y por eso comenzó a crecer una tendencia que se afianzó en el último tiempo: el tabaco armado.
Cada vez es más común, principalmente en los jóvenes, ver a los fumadores con sus paquetes de tabaco, filtros y papeles en vez del clásico atado de cigarrillos.
Por eso, CLG dialogó con Juan, de la tabaquería El Clásico, quien habló sobre la nueva costumbre del tabaco armado: más barato, se fuma menos y hasta es «más sano», remarcó él.
En primer lugar, aseguró que es notorio el crecimiento de la venta de tabaco para armar: «Se nota mucho la tendencia, al principio se creía que era una moda, pero hoy ya está impuesto en la gente. Se está fumando mucho más tabaco armado para abaratar costos y para fumar un poco más sano».
Juan indicó que es menos dañino para la salud ya que no contiene tantos agregados como un cigarrillo común: «Es más sano porque no tiene tantos aditivos, hay tabacos naturales, orgánicos o de muchas variedades».
Además, explicó que al utilizar tabaco armado se fuma menos cantidad: «El industrial se fuma mucho porque se quema demasiado, en el armado se usan papeles de combustión lenta y al no pitar el cigarrillo se apaga. De esa manera uno tiene el cigarrillo en la mano alrededor de 20 minutos y es real lo que se fuma».
Sobre los costos, aseguró que es notorio como se abarata: «Uno ahorra la mitad. Al principio tiene un costo elevado porque hay que comprar el armador, el tabaco, el papel y el filtro. Pero una vez que te acostumbraste, ahorrás la mitad. El que fuma 20 cigarrillos industriales por día, fuma 7 u 8 de los armados».
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