El ministro de Justicia y Derechos Humanos participó este viernes en Rosario de una visita por el espacio de memoria donde funcionó el ex Servicio de Informaciones (SI) de la Policía de la provincia durante la última dictadura, junto a sobrevivientes, representantes de organizaciones sociales y funcionarios. “El compromiso de Santa Fe con la memoria tiene un enorme significado en momentos en que se banaliza el terrorismo de Estado”, expresó Ricardo Silberstein, y anunció que a pedido del gobernador Miguel Lifschitz la provincia se constituirá como querellante en causas de lesa humanidad y se llevará adelante un plan de obras en sitios emblemáticos –que funcionaron como centros clandestinos de detención y tortura- como la Quinta de Funes, La Calamita de Granadero Baigorria, el ex Batallón 121 de Rosario y la comisaría cuarta de Santa Fe.
En la esquina de San Lorenzo y Dorrego de Rosario, el gobierno provincial preservó y habilitó para recorridos abiertos a la comunidad el espacio donde funcionó el ex SI. Allí, además puede consultarse el Archivo audiovisual de juicios de lesa humanidad, como un aporte a la reconstrucción de la memoria colectiva. En vísperas de un nuevo aniversario del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, autoridades políticas, sobrevivientes y representantes de organizaciones sociales hicieron una visita especial, durante la cual el ministro Silberstein subrayó: “Para nosotros como gobierno provincial tiene una enorme significación política mantener el compromiso con las políticas públicas en relación a la memoria, la verdad y la justicia, sobre todo en momentos en los que hay cuestionamientos a estas políticas y se banaliza lo que sucedió con el terrorismo de Estado en la Argentina”.
“El gobernador nos ha pedido que nos constituyamos como querellantes en distintas causas que están tramitando, y que llevemos adelante un plan de obras para la Quinta de Funes, La Calamita, el Batallón 121 de Rosario y la Comisaría cuarta de Santa Fe”, puntualizó el ministro de Justicia y Derechos Humanos. “Si no hay compromiso con la memoria, la verdad y la justicia no hay democracia plena. En esos lugares trabajaremos promoviendo los derechos humanos, recordando lo que sucedió pero con un compromiso cotidiano con los derechos humanos como lo es la educación en valores: la solidaridad, el respeto a la pluralidad y a la vida, por ejemplo”, explicó Silberstein. Para el funcionario “quienes han cometido delitos de lesa humanidad y genocidios tenían educación pero no en valores, donde hay una educación con valores la condición humana puede desarrollarse plenamente”.
En tanto el secretario de Derechos Humanos de la provincia, Marcelo Trucco, detalló que el gobierno se encuentra en conversaciones con el fuero federal en relación a la constitución como querellantes ya que hay algunas causas que estén en el fuero de instrucción y otras en juicio y será objeto de un análisis estratégico en cuáles participar. “Es una decisión política importante y poco común en el país de parte de las provincias. La memoria, la verdad y la justicia son valores inclaudicables pero también son cuestiones concretas para el gobierno de Santa Fe”, sentenció Trucco.
En primera persona
De la visita al ex centro clandestino de detención más grande de la provincia, por la cantidad de ciudadanos que pasaron por allí, participó el secretario de Seguridad Comunitaria de Santa Fe, Ángel Ruani, quien estuvo detenido ilegalmente en el SI en 1976 y 1978 y fue denunciante desde los albores de la democracia, luego testigo en las causas de lesa humanidad que se tramitaron en el fuero federal. “Hoy hicimos un poco de memoria de lo que fue este lugar de tortura y secuestro de personas siempre en la ciudad de Rosario, no inventó nada la dictadura de Videla, Massera y Agosti: ya había sucedido en la dictadura anterior y en otros momentos”, contó Ruani, y en ese sentido apuntó: “Hay un hilo conductor en cuanto a la represión del Servicio de Informaciones de la Policía de Rosario”.
El funcionario y sobreviviente celebró que exista un archivo con los registros audiovisuales de los juicios, donde investigadores y ciudadanos interesados pueden consultar las audiencias orales. Se calcula que por el ex SI pasaron unas dos mil personas, entre ellos gran parte de quienes luego resultaron desaparecidos. “En este edificio y en la sede del comando del segundo cuerpo de Ejército (Moreno y Córdoba), donde hoy funciona el Museo de la Memoria y estaba la conducción política de la represión, se decidió la vida y la muerte de muchas personas de nuestra ciudad y de ciudades vecinas que residían y militaban en Rosario”, completó Ruani.
Espacio de memoria
El ex SI funcionaba en la esquina de la céntrica manzana comprendida entre San Lorenzo, Dorrego, Santa Fe y Moreno y que albergara a la ex Jefatura de Policía. La construcción, que en 2017 cumplió cien años, es actualmente sede de la delegación del gobierno provincial. Como espacio de memoria, es uno de los pocos lugares junto con el Museo de la Memoria donde operó el terrorismo de Estado que están abiertos al público.
El objetivo de la apertura del espacio al conjunto de la sociedad (en 2015) fue garantizar su función testimonial. Esto fue posible gracias al testimonio de los sobrevivientes, la lucha de los organismos de derechos humanos y el trabajo de peritos técnicos y científicos. La Secretaría de Derechos Humanos propone que el recorrido arranque desde la plaza interior de la sede de gobierno, tal como se realizaba durante el funcionamiento del ex SI (los detenidos eran ingresados en auto por el portón sobre calle San Lorenzo).
En rigor el Espacio de Memoria cuenta con dos entradas. Una lateral, junto al portón sobre calle Dorrego, el cual desde 2015 permanece cerrado, tal como estaba durante la última dictadura, que permite conocer el ex centro clandestino siguiendo el circuito represivo original atravesado por los detenidos desaparecidos. Y una segunda entrada desde el frente vidriado, que invita a recorrer las muestras a lo largo de la escalera de mármol y habilita el ingreso al archivo audiovisual ubicado en el entrepiso. Este archivo posee registros de los juicios de lesa humanidad realizados en los Tribunales Federales de la provincia desde 2009 y promueve actividades educativas.