Siete integrantes del grupo denominado “La banda de los cerrajeros” fueron condenados este martes a penas de entre 6 y 22 años de prisión, acusados de realizar 15 entraderas violentas a viviendas de la ciudad en 11 meses, informaron fuentes judiciales.
Se trata de una banda liderada por un rosarino y su hijo de 19 años que reclutaban delincuentes en el Gran Buenos Aires para realizar entraderas en la ciudad mediante el uso de violencia, según se ventiló en el juicio.
Los miembros del grupo delictivo, conocido como “La banda de los cerrajeros” por vulnerar cerraduras mediante el uso de un elemento plástico que les permitía no forzarlas, fueron detenidos el 10 de julio de 2016 tras distintos allanamientos realizados en Rosario, Funes, La Matanza, Lomas de Zamora y Capital Federal.
El modus operandi de la banda consistía en ingresar a domicilios previamente seleccionados cuando “estaba toda la familia”, con el fin de amedrentar a los padres mediante amenazas a los hijos, explicó la fiscal del juicio Viviana Oconnell, quien aclaró que los casos que fueron juzgados en este debate ocurrieron entre agosto del 2015 y julio del 2016.
“Nosotros tenemos 47 denuncias por el mismo modus operandi, hemos traído a juicio 15 hechos”, dijo Oconnell tras el fallo. Añadió que “los robos fueron muy traumáticos, no sólo por el hecho de que utilizaban armas, sino también cuchillos y planchas con los que aterrorizaban a las víctimas”.
La fiscal aseguró que en algunos de los 15 hechos juzgados “amenazaban a los padres con quemar a los hijos y en un caso quemaron a una víctima” con una plancha.
El tribunal integrado por los jueces Paula Álvarez, Mónica Lamperti y Pablo Pinto condenó al rosarino Claudio Martín Cereijo (45) como jefe de la asociación ilícita y por los 15 hechos de robo calificados a 22 años de reclusión, y a 20 años al co-jefe de la banda, el bonaerense Juan Alberto Figueroa Vallejos.
También condenó al hijo del primero, Nicolás Cereijo (19), a 11 años de cárcel como miembro de la asociación ilícita, por robo calificado y tenencia ilegal de arma.
Los otros cuatro acusados recibieron penas de 16 a 6 años de prisión en relación a la cantidad de entraderas en las que participaron.