Plantean la redistribución de las salidas de taxis náuticos y reclaman mayores controles de velocidad y alcoholemia a lanchas a motor
La actividad náutica en el río Paraná es una insignia histórica de Rosario que ha crecido notoriamente en los últimos años, tanto deportiva como recreacionalmente. Cada verano el número de kayaks, piraguas, botes, lanchas, veleros y demás embarcaciones es mayor, lo cual va a la par de una fervorosa actividad en la isla. Si bien esto habla de un polo cultural, deportivo y económico en auge, el tráfico náutico preocupa seriamente a quienes desde hace años practican deportes en el agua. Es por eso que se creó la Multisectorial de Deportes Náuticos, la cual hizo su presentación oficial este fin de semana con un reclamo dirigido hacia la Municipalidad.
A partir de las 11 de este sábado, instituciones deportivas y ambientales se concentraron en la zona de la Rambla Cataluña y marchan por agua y tierra hacia Costa Alta para llevar adelante una serie de pedidos dirigidos hacia el Ejecutivo local y Prefectura, que gira en torno a un reclamo «por una navegación más segura». En ese sentido, CLG dialogó con Augusto Robert, referente de la flamante Multisectorial, quien explicó en detalle la situación y las solicitudes.
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«Participarán personas de todas las asociaciones de los deportes náuticos que se practican en Rosario, y también los clubes de la costa, la Multisectorial Humedales, El Paraná No Se Toca y otras organizaciones. Somos todas personas que nos hemos vinculado por la necesidad de tener una práctica más segura y sustentable del río», expresó en primer lugar.
En ese marco, indicó que se entregará una carta: «Vamos a presentar una nota dirigida al intendente con una carta de intención, presentándonos como organización, y planteando un plan de seguridad en el que se viene trabajando desde principios de año con todas las asociaciones con un rediseño de la costa para tratar de evitar los accidentes y las situaciones de riesgo que estamos viviendo las personas que manejamos grupos en el río».
«El problema se suele centralizar en el kayak y creo que hay una mala evaluación, porque es real que los kayaks son muchos y son la mayoría, pero analizamos que el problema gira en torno a las lanchas a motor por la velocidad y el poco espacio. Es un espacio reducido con muchas actividades. Todas las embarcaciones crecieron en número, pero el espacio sigue siendo el mismo. Tenemos que trabajar entre todas las actividades para cuidarnos entre todos y hacer un Rosario que sea sustentable y amable al turismo», ahondó.
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Es por eso que Robert cuestionó la forma en la que se manejan los conductores de lanchas a motor: «Las lanchas van planeando y ‘a mil’, muchas veces con poca experiencia en el río. Eso es lo que nos hace vivir situaciones de mucho riesgo y temor cuando tenemos las clases de remo, no sabemos cuándo nos van a atropellar».
Uno de los pedidos que llevarán a la Municipalidad será la reorganización de los puertos desde donde parten las «taxilanchas»: «Pedimos que se reabra La Fluvial como puerto deportivo mercante para taxis náuticos y lanchas colectivas porque al estar cerrada tenés a todo Rosario saliendo sólo por zona norte. A su vez, la propuesta que hemos visto de Prefectura y la Municipalidad ha sido instalar un muelle donde hace 100 años que Remeros da clases de remo».
«Hay que retrabajar la distribución de la salida de los puertos de Rosario hacia las islas para fomentar el turismo y el comercio. Hay que ordenarlo de una forma en la que todos podamos convivir y protegernos, ya que los propios taxis han rescatado muchos botes a remo y kayaks», añadió.
Por último, Robert reclamó mayores controles para los conductores de lanchas: «También pedimos que haya controles de alcoholemia tanto en los puertos deportivos, guarderías y clubes al regreso de la navegación, como también en la navegación en el río. Hoy no nos consta que Prefectura esté realizando controles de alcoholemia».