Al menos 29 personas murieron al caer un avión en la localidad de Goma, en el noreste de la República Democrática del Congo, informaron fuentes oficiales. Las víctimas fatales son todos los que viajaban en la aeronave (17 pasajeros y dos tripulantes) y diez personas que vivían en el edificio donde se estrelló.
Marie Lumo Kahombo, vicegobernadora de la provincia nororiental de Kivu del Norte, a la que pertenece Goma, indicó que de las diez víctimas que no iban a bordo había siete miembros de una misma familia. «Hubo (además) un sobreviviente entre las víctimas» del siniestro, dijo a su vez el administrador de Goma, Abelly Felly, citado por la agencia Efe.
Entre las víctimas mortales del siniestro se encuentra la activista Albertine Mambo Zawadi, coordinadora de la ONG congoleña Sofepadi que luchaba por la defensa de los derechos de la mujer en el Congo y acompañaba a mujeres maltratadas y violadas como arma de guerra, confirmó la entidad en un mensaje por la red social Twitter.
El avión, modelo Dornier 228-100 y propiedad del transportista privado Busy Bee, se dirigía rumbo a Beni y Butembo -a unos 350 kilómetros al norte de Goma- cuando dos minutos después del despegue se estrelló en el barrio popular de Birere, de acuerdo con un comunicado del Ministerio de Transporte que sin embargo da cuenta de 26 muertos.
Las primeras investigaciones apuntan a una falla técnico, pero las causas precisas de qué pudo provocar este suceso todavía no están claras y el Gobierno congoleño sigue estudiando el caso.