"Fue una provocación, una provocación compleja", aseguró Putin
El presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró este miércoles que Estados Unidos participó en el incidente con el destructor británico Defender en el Mar Negro y dijo que fue una provocación.
«Por cierto que fue una provocación, una provocación compleja, llevada a cabo no solo por los británicos, sino también por los norteamericanos», relató Putin en Línea directa, el evento televisivo anual en el que el mandatario responde a las preguntas de los ciudadanos, que llegan a través de las plataformas en línea, teléfono o mensajes de texto y voz.
El presidente comentó que el Defender se adentró en las aguas territoriales rusas el 23 de junio por la tarde, pero más temprano, sobre las 7.30 de la mañana, un avión espía estadounidense despegó desde un aeródromo de la OTAN en Grecia.
«Lo observábamos muy bien… Era evidente que el destructor entró en el territorio ruso con fines militares, intentando descubrir con la ayuda del avión espía las acciones de las fuerzas armadas rusas ante provocaciones y conocer cómo funciona todo… Lo veíamos y le estuvimos proporcionando la información que considerábamos necesaria», reveló Putin, citado por la agencia de noticias Sputnik.
El mandatario también comentó que Rusia está preocupada por el hecho de que la OTAN haya empezado a aprovechar el territorio de Ucrania con fines militares. «Nos preocupa el aprovechamiento militar del territorio de Ucrania. En virtud de la Constitución ucraniana, ese país no puede acoger bases militares extranjeras… El aprovechamiento militar de un territorio fronterizo con Rusia crea serios problemas de seguridad», explicó.
El Ministerio de Defensa ruso denunció el 23 de junio que el destructor británico HMS Defender se adentró tres kilómetros en las aguas jurisdiccionales rusas cerca de Crimea, la península ucraniana que Rusia anexó tras un levantamiento separatista en 2014.
Un caza Su-24 ruso tuvo que hacer disparos de advertencia con munición real para expulsar al buque intruso. Las autoridades británicas negaron el incidente. «No se hizo ningún disparo de advertencia contra el HMS Defender», dijo el Ministerio de Defensa británico vía Twitter y argumentó que “el barco de la Marina real estaba realizando un paso inocente a través de las aguas territoriales de Ucrania de conformidad con el derecho internacional”.
Reino Unido no reconoce la incorporación de Crimea a Rusia. Según un comunicado de la Marina Real británica del 10 de junio, el buque HMS Defender se encuentra en la región para maniobras de la OTAN y «se separó temporalmente del grupo de trabajo para efectuar sus propias misiones en el Mar Negro”, frente a costas donde Rusia tiene una base naval y cuyas aguas han sido objeto de varios incidentes en el pasado.
«Durante las últimas semanas, el Defender ha estado recibiendo un entrenamiento intensivo y trabajando en la operación Sea Guardian, la misión antiterrorista de la OTAN en el Mediterráneo», informó el comunicado de la armada británica.
Por su parte, el canciller de Ucrania, Dmytro Kuleba, dijo en Twitter que consideraba el incidente como una continuación de la «política agresiva y provocadora» de Rusia en el Mar Negro y el Mar de Azov.
Rusia ha realizado en esta región varias maniobras militares en los últimos meses, incluso el despliegue temporal en abril de más de 100.000 soldados en las fronteras con el este de Ucrania, cerca de donde aún se pelea una guerra separatista, y en la península de Crimea, una demostración de fuerza que provocó fuertes tensiones con las potencias occidentales.
En 2018, Rusia interceptó tres buques de guerra ucranianos y capturó 24 marineros que intentaban entrar en el Mar de Azov, compartido por los dos países. Fue el primer incidente armado directo entre ambos.