El gobierno enviará el lunes al Congreso el proyecto de Presupuesto 2020 que prevé un crecimiento del 1%, inflación del 34% y un dólar a $75, mientras que no contempla la refinanciación de la deuda ya que la deberá decidir el Parlamento.
El ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, junto a su gabinete esta definiendo los detalles del proyecto para cumplir con la formalidad exigida en la ley de Administración Financiera, que establece que el Presupuesto debe presentarse el 15 de septiembre o el primer día hábil posterior.
Sin embargo, este año el tratamiento estará condicionado por el proceso electoral y la posibilidad cierta de un cambio de gobierno a partir de lo ocurrido en las Paso con el triunfo del Frente de Todos encabezado por Alberto Fernández y Cristina Fernández.
Según fuentes del Palacio de Hacienda, el proyecto de ley mantendría la meta de superávit fiscal primario del 1% del PBI, un resultado financiero del 2,5% y un crecimiento económico del 1%, tras estimar que la caída de la economía será este año del 2,6%.
El gobierno redujo así las estimaciones de crecimiento del 3,5% proyectadas al enviar, a mediados de año, el adelanto presupuestario.
Como el gobierno tiene pendiente negociaciones con el FMI y con la oposición por la reestructuración de la deuda, buscará un acuerdo político sobre un proyecto para luego incorporarlo al presupuesto.
Según las fuentes de Hacienda se estima que los recursos totales crecerían un 47% y las erogaciones lo harían un 36%.
El proyecto estima que los gastos previsionales, crecerán un 40%, mientras que las partidas del resto del gasto se ubicarían con aumentos por debajo de la inflación, según las fuentes extraoficiales.
La iniciativa ingresará el lunes al Congreso, pero podría tratarse después de las elecciones generales de octubre.