Las familias de los menores que iban al Jardín Tribilín de San Isidro, en el que habrían sido maltratados y sufrido diversas torturas, pedirán para las cinco docentes imputadas en la causa la pena de 14 años de prisión.
Así lo confirmó a NA, Sergio Arenas, el abogado que representa a diez madres y diez padres de los menores que tenían entre 3 y 5 años, en el momento de las denuncias, y que resultaron víctimas de los maltratos ocurridos en 2013.
«Vamos a pedir la pena máxima para las imputadas. Vamos a pedir 14 años por los delitos de abandono agravado y amenazas agravadas, ya que lo que vivieron esos niños, que hoy ya tienen alrededor de 7 años, fueron atrocidades y situaciones realmente indescriptibles», dijo Arenas, quien cree que el próximo jueves el Tribunal estará en condiciones de dar su veredicto.
El letrado comentó además que varios niños padecen secuelas en la actualidad, como falta de aprendizaje, o no pueden dormir bien y que el pasado martes, cuando comenzó el juicio y varios medios televisivos mostraban las imágenes del jardín, uno de ellos, le dijo a su mamá: «Ese era el jardín donde me ahogaban».
El último martes, el Tribunal Oral Criminal (TOC) número 4 de San Isidro comenzó a juzgar a tres maestras, a la directora y a la vicedirectora del Jardín Tribilín, quienes llegaron en libertad al juicio oral, acusadas por los delitos de «abandono de persona, amenazas y lesiones».
Las imputadas son Yanina Gogonza, Noelia Gallardo, Mariana Buchniv, Gisela Diap, y Noemí Núñez, quienes desde el comienzo de la investigación obtuvieron el beneficio de la eximición de prisión y por eso nunca estuvieron detenidas.
La denuncia contra las docentes había sido realizada por un padre en febrero de 2013 cuando empezó a sospechar que su hija era maltratada en el jardín, por lo que puso un grabador en la mochila de la nena y así logró registrar las voces y gritos de las maestras.
Con los audios en su poder, el hombre realizó la denuncia, por lo que el fiscal Franco Servidio, que estuvo a cargo de la causa, ordenó allanar el jardín.
Según los audios grabados, en la pileta que había en el jardín se habrían producido los malos tratos de las maestras hacia los niños, y en la grabación quedó registrado el momento en el que las maestras insultaban, amenazaban y encerraban a los niños por varias horas en el jardín.
El juicio que comenzó el pasado martes en los tribunales de San Isidro se extenderá hasta el próximo jueves 18 de octubre, cuando se prevé que se dicte la sentencia.
Esta semana que pasó declararon durante las audiencias la mayoría de los testigos de la fiscalía y de la querella y faltan algunos de la defensa y los peritos de la causa, y la defensa volvió a insistir con el pedido de nulidad del audio que forma parte de las pruebas en el expediente.