En Berlín, Alemania, una pareja de pingüinos está en la dulce espera. Skipper y Ping, de diez años, adoptaron un huevo abandonado por la madre biológica. La particularidad, las aves perteneces a la especie Rey Machos.
Los machos habían mostrado previamente sus instintos como cuidadores al tratar de incubar piedras e incluso peces, dijo un portavoz del zoológico. De esta manera, se demuestra que los animales, y la pareja gay de pingüinos, son más parecidos a los seres humanos de lo que se pensaba.
El pingüino real es una especie que deja sólo un huevo por año y la incubación tarda 55 días. Si la pareja tiene éxito, será la primera cría que nazca en Berlín en más de 20 años.
El mes pasado, se conoció una historia similar. Dos pingüinos machos que viven en pareja en un zoológico marino de Australia incubaron un huevo. El bebé pingüino ya nació y ahora se ocupan de la cría como padres.