La Organización remarcó que en el continente africano solo un 2 por ciento de la población está inoculada
La decisión de los países ricos de aplicar dosis de refuerzo de vacunas del coronavirus mientras millones de personas en África permanecen sin vacunar son una burla al principio de equidad y «amenazan la promesa de un mañana más brillante» para el continente, denunció la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Justo cuando nuestros esfuerzos parecen estar despegando, África se enfrenta a vientos en contra. Los movimientos de algunos países a nivel global para introducir dosis de refuerzo se burlan de la equidad de las vacunas», dijo en rueda de prensa virtual la directora regional de la OMS para África, Matshidiso Moeti.
Las declaraciones de Moeti se producen un día después de que Estados Unidos anunciara que ofrecerá una tercera dosis anticovid a toda su población desde septiembre bajo el argumento de que su protección disminuye «con el tiempo» y ante el avance de la variante Delta, más contagiosa y predominante en ese país.
La directora regional y otros funcionarios de salud africanos, incluidos los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de África, habían advertido contra las inyecciones de refuerzo en las últimas semanas, ya que menos del 2% de la población del continente de 1.300 millones de personas está completamente vacunada.
La situación en África sigue «muy frágil», ya que la variante Delta es ahora dominante en la mayoría de los 54 países del continente, dijo Moeti, y recordó que se confirmaron más de 7,3 millones de casos y más de 186.000 muertes en el continente, donde los sistemas de salud se esfuerzan por proporcionar oxígeno médico y otros cuidados.
La funcionaria de la ONU recordó la situación «ya muy desigual» a nivel mundial en el suministro de vacunas e instó a que, en cambio, se haga hincapié en avanzar en la vacunación de personas en África, cuyos países están muy por detrás de gran parte del mundo en acceso y cobertura, informó la cadena CNN.
A principios de esta semana, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, calificó de «inconcebible» que algunos países ahora estén ofreciendo dosis de refuerzo «mientras tantas personas permanecen desprotegidas».
Moeti dijo que la organización insiste en la necesidad de que «los países más ricos que tienen suministros incluso superiores a su población aumenten sus donaciones a los condados africanos desfavorecidos».
Pese a lo anterior, las autoridades sanitarias africanas se mostraron optimistas en las últimas semanas respecto a un cambio de ritmo a partir de agosto gracias a un incremento significativo de la recepción de dosis, con envíos de la Unión Africana (UA) -mediante un mecanismo de adquisición colectivo- y con un nuevo impulso de la plataforma de acceso equitativo Covax, impulsada por la OMS.
De no haber sorpresas, Moeti se mostró confiada en que la meta de vacunar a al menos a un 30% de la población africana para finales de este año está «aún al alcance».
Ese número, aun así, seguirá contrastando mucho con las cifras de regiones como Europa o los Estados Unidos, que ya tienen completamente vacunada a más de la mitad de su población y consideran o tienen planes ya para la inoculación de dosis de refuerzo.