Opinión

Opinión: «Verdaderos antagonismos»


Por Leo Ricciardino

Por Leo Ricciardino

“Alberto se recuesta en Cristina”, dicen en los grandes medios pomposos analistas para dar a entrever que en una “interna” peronista la “malicia” de la vice se impone sobre la racionalidad socialdemócrata del presidente. Y entonces, ya todo está perdido.

Alberto Fernández no puede dominar los “demonios” y el kirchnerismo más radical impone sus criterios para ensanchar la grieta y volver a hacer del odio la moneda corriente de los argentinos.

Eso es lo que necesitan decir, porque de lo contrario deberían hablar de que la unidad en la diversidad que llevó al triunfo al peronismo, continúa y que esa situación probablemente lo lleve a ganar nuevamente las elecciones de medio término. Si no, tendrían que conjeturar que el ejercicio del poder tiende a consolidar aún más esa unión.

Si se sustrajeran por un momento los nombres propios se extinguiría rápidamente el estruendo de la grieta. Porque sólo quedarían en pie y visibles los dos proyectos en pugna en Argentina, que por otra parte son históricos. Un gobierno que liquida un ministerio de Salud y otro que lo repone rápidamente y lo hace funcionar en la pandemia. Un
gobierno que prometió sacar ganancias a los trabajadores y lo único que hizo fue aumentar en millones los que pasaron a ser alcanzados por este impuesto. Un gobierno que está a pasos de elevar la alícuota para meter muchos pesos en los bolsillos de muchos trabajadores.

Un gobierno que endeudó al país en más de 44 mil millones de dólares para fugarlos y volvió a ponernos de rodillas ante el FMI. Una gestión que promete pagar esa deuda que heredó pero no sobre la base de más ajuste a los argentinos. Un gobierno que sometió a los ciudadanos a pagar tarifas dolarizadas y otro que les puso un freno y las hizo más accesibles para que “nadie vuelva a tener que elegir entre comer o pagar las tarifas”, como dijo el presidente Fernández.

Claro que hay antagonismos, pero los verdaderos son estos de fondo. El resto es pirotecnia destinada a confundir y cazar incautos. ¿Dónde más se recostaría Alberto sino en Cristina que aportó los votos necesarios para llevarlo a la presidencia? El peronismo junto es una formidable maquinaria electoral pero también acierta en gestión. Seguramente, el tema pendiente es la inflación y volver a las fuentes. Esas que indican que ese movimiento transforma pobreza en esperanza y trabajo.