Por Enrique Genovar - CLG
Por Enrique Genovar – CLG
Central está atravesando un momento de incertidumbre en esta recta final del campeonato. El equipo de Miguel Ángel Russo está en una situación de incomodidad en el torneo y llegó por primera vez en el año a cuatro partidos sin victorias. Si bien no es un presente para que se prendan luces rojas, es uno en que analizarlo vale la pena para intentar buscar los motivos de este estancamiento que le puede significar terminar este primer semestre afuera de la zona de copas internacionales.
Si bien es cierto que Central se ha ganado el respeto de los rivales, como dice el entrenador, y una muestra de ello es que enfrentó a rivales que le plantearon una línea de cinco; también es verdad que hoy Russo no le encuentra la vuelta.
Pero en esa búsqueda de alternativas en la que está el técnico en cada entrenamiento previo a los partidos surge una pregunta: ¿tiene otras herramientas para modificar lo se ve? Para buscar la respuesta es imprescindible analizar a este plantel.
Russo no ha utilizado a muchos jugadores a lo largo del campeonato. Hoy el equipo casi sale de memoria en la cabeza de cualquier hincha, pero esta cuestión no se debe a grandes rendimientos de los que juegan. Sino que este once que solamente se modifica por lesiones o suspensiones sale de corrido porque los que están en el banco no tienen un rendimiento como para ganarse la titularidad.
A lo largo del torneo hubo no más de dos futbolistas que comenzaron en el banco y se ganaron su lugar dentro del once. Uno de ellos es Jorge Broun, quien fue suplente en el arranque, y tras el mal rendimiento que tuvo Servio en las primeras fechas se consolidó como titular. El otro ejemplo es Lautaro Giaccone, hoy con una lesión y ante Estudiantes se sintió su ausencia. El juvenil comenzó siendo alternativa de Gino Infantino y tras el juego frente a Unión, Russo lo mandó a la cancha.
Sacando estos dos casos puntuales el resto no ha hecho lo suficiente para quedarse con un lugar dentro de los que salen desde el arranque en casa partido. Juan Cruz Komar, por ejemplo, juega si el técnico decide modificar el esquema. En el medio, tras la lesión de Walter Montoya, juegan siempre los mismos y arriba Alejo Véliz es indiscutido.
La respuesta a la pregunta inicial surge sola, no hay más alternativas al menos para el entrenador. Claro que este presente corre por su cuenta y está en el trabajo diario encontrarle la vuelta. Pero por otro lado surge que los que llegaron, salvo los cuatro que juegan siempre, no han dado la talla. Un ejemplo de ello es Bruno Bianchi, el delantero que salió segundo en la tabla de goleadores de la Primera Nacional en 2022 ha jugado poco y nada. Y cuando entró no cambió la ecuación del juego que se estaba desarrollando. Pero en los entrenamientos está claro que tampoco se gana su lugar. De hecho cuando Véliz estuvo en el Mundial, Russo improvisó con Jhonatan Candia como centrodelantero y por encima del ex All Boys.
Uno de los que tuvo también poca participación es Luca Martínez Dupuy, al cual el técnico no le dio casi oportunidades y esto es una de las críticas principales que se hace hoy al cuerpo técnico.
La campaña sigue siendo buena, pero si Central termina afuera de los 10 bajará su califación. Encontrarle la vuelta a este presente y apuntar bien a la hora de reforzar el plantel para el segundo semestre es lo que se le viene al técnico y también a la dirigencia.