Newell's, con un hermetismo severo, busca un nueve de jerarquía, pero también sabe que debe vender
Newell’s, con un hermetismo severo, busca un nueve de jerarquía, pero también sabe que debe vender
Terminó el primer semestre del 2019 y se abrió el mercado de pases. Newell’s no queda exento de esto e ingresó en busca de reformar su equipo para salir por completo de la zona baja de los promedios.
Como dirigentes la meta pasa por vender y comprar continuando con el orden y también dejando contento a Frank Kudelka, que quiere reforzar el plantel en zonas cumbres.
“Tenemos que mantener el equilibrio, saber a qué apuntamos y alejarse de la zona del descenso”, expresó Cristian D’amico, vicepresidente leproso, a Estadio 3 de LT3. Por eso, el directivo aseguró que el primer objetivo es mantener el plantel y agregarle recambio para el entrenador.
El DT quiere un lateral por izquierda, un mediocampista central, un delantero que pueda jugar por la banda derecha y, como pedido fundamental, un delantero central. Y para llegar a completar todos los cupos, Newell’s necesita vender y hoy en día, luego del semestre positivo, los jugadores expuestos en el mercado son Jerónimo Cacciabue y Aníbal Moreno.
Sin embargo, a días de terminar el 2019, “No hay ninguna oferta real por los dos. Nunca existió lo de River”, aseguró D’Amico en el dialogo radial. Así contradijo los trascendidos que daban a los dos jugadores en el conjunto Millonario.
No conforme con esa tajante declaración, fue por más y lanzó: “Más de 10 millones de dólares. Eso es lo que vale Moreno”.
A la hora de comprar, la prioridad pasa por el delantero. Pero sin nombres en los pasillos leprosos, la dirigencia busca tener al 9 para el regreso a los trabajos en enero. Sólo se conoció el rumor de Lucas Barrios y está siendo evaluado por Kudelka.
Los delanteros que hoy tiene el rojinegro no conforman. Ni Albertengo, ni Salinas, ni la vuelta de Fydriszewski, ni otras variantes tácticas. Kudelka sabe que falta un delantero en el punto del penal que de la estoqueada final.
Por eso, y con los días para comenzar la pretemporada contados, los directivos se mueven para complacer al entrenador