Por José Odisio
Ganar en Mendoza fue importante para Newell’s. Ser líder en esta etapa repechaje y encontrar algo de aquel funcionamiento futbolístico pasado aflojó la oleada de críticas que, con razón o no, caían sobre el cuerpo técnico y de rebote a los jugadores.
Está claro que esta Copa Diego Maradona le sacó trascendencia a sumar de a tres. Todos quieren ganar, obvio, pero no molesta tanto perder. O mejor dicho, no duele tanto, ya que no hay promedios ni premios importantes. Entonces, cuesta encontrar motivaciones, mucho más si el equipo juega la Copa Complementación, donde ni siquiera el nombre seduce.
Pero en Cuyo, Newell’s tuvo un hecho que supera cualquier torneo. Maxi Rodríguez fue figura y anotó un gol, y con ese grito llegó a los 90 tantos con la casaca rojinegra, para alcanzar el segundo lugar del podio histórico.
Resulta difícil dimensionar lo logrado por Maxi. El sábado se puso a la par de Cucurucho Santamaría y dejó atrás al Mono Obberti, dos delanteros icónicos de la Lepra. Y si bien la marca de Condorito Ramos parece lejana, nadie se animaría a apostar a que no lo alcance, mucho más si la Fiera prolonga su carrera en un 2021 con mucha competencia.
Maxi es un símbolo del club. Lo es hoy dentro de la cancha, lo será cuando se retire fuera de ella. Vestir sólo la camiseta del Newell’s de sus amores lo pone en un lugar único. No quiso jugar en Argentina con otra casaca. Por eso cuando se enojó en 2016 se fue a Peñarol, y desechó propuestas como Boca y San Lorenzo. Y eso le da mayor dimensión a su logro. Porque además, alguna vez dejó la comodidad de Liverpool para venir a salvar a Newell’s del descenso, con la banda que armó el Tata. Y su premio fue ser campeón.
Maxi se cansó de hacer goles. Y tiene algunos más guardados. Cada hincha leproso tendrá su preferido. Hay algunos importantes, y otros sólo para la estadística. Seguramente el cuarto ante Racing sobre la hora en el 4-3 decisivo del título 2013; y el del Clásico en Arroyito para ganar en la última jugada al rival eterno son los que surgen espontáneamente. Y deben aparecer obligadamente en la avant premier de la película de su vida rojinegra. Lo que no hay dudas, es que Maximiliano Rodríguez ya sacó número para ser leyenda en el Parque.