El partido más esperado del año a nivel clubes jugado en el Estadio Olímpico Atatürk lo ganó el equipo de Guardiola 1 a 0 con gol de Rodri
El Manchester City de Pep Guardiola aseguró la triple corona de la temporada, al consagrarse por primera vez en la historia como ganador de la Liga de Campeones de Europa luego de vencer a Inter de Milán 1 a 0 en una pareja final que se disputó en el estadio Olímpico Atatürk de Estambul, Turquía.
Los «citizens» aprovecharon una de las pocas desconcentraciones defensiva del equipo italiano para anotar el único gol del partido con un remate del español Rodrigo a los 23 minutos del segundo tiempo.
¡¡GOL DEL CITY!! A los 23' ST, Rodri abre el marcador en Turquía vs. Inter en la gran final de la #CHAMPIONSxESPN.
📺 La #UCLFinal por #ESPNenStarPlus pic.twitter.com/jS4clCSgQL
— SportsCenter (@SC_ESPN) June 10, 2023
El inicio del encuentro mostró dos caras: un arranque temeroso de los italianos siendo cautelosos cuando tenían la pelota y, por otro lado, la presión alta y el control del balón por parte de los ingleses. La primera aproximación llegó a los cinco minutos cuando, luego de una serie de toques, la pelota llegó a la izquierda del área donde Bernardo Silva intentó colocar la pelota en el ángulo derecho de André Onana y no lo logró por centímetros.
Con el correr de los minutos, Federico Dimarco se empezó a convertir en la carta de ataque y el generador de peligro del Inter de Milán que, poco a poco, comenzó a tomar riesgos buscando conectar el triángulo Brozovic – Dzeko – Lautaro Martínez.
A los 28, apareció la primera oportunidad para el noruego Erling Haaland que quedó mano a mano ante André Onana, tras un gran pase entre líneas de Kevin De Bruyne, y definió por abajo del arquero que se arrodilló rechazando la pelota con su rodilla izquierda.
En el transcurso del partido, el equipo británico no justificó el favoritismo asignado pero al final se hizo con el triunfo que aseguró un cierre de campaña soñado tras la conquista de la Premier League y la FA Cup.
Guardiola, que vuelve a ganar la Champions tras alcanzarla con Barcelona en 2009 y 2011, mantuvo todo el partido en el banco de suplentes al argentino Julián Álvarez.
La «Araña», de todos modos, dejó su marca en esta histórica conquista de Europa, al sumar tres goles y dos asistencias en diez participaciones a lo largo del torneo.
El otro campeón mundial argentino, Lautaro Martínez, no pudo conducir al Inter hacia la cuarta «Orejona», a trece años de la última en la brillante noche de Diego Milito ante Bayern Múnich en el Santiago Bernabéu.
El Manchester City, que festejó el 14to. título en la era Guardiola, se convirtió en el 23er. club campeón del fútbol europeo después de Real Madrid (14), Milan (7), Bayern Múnich (6), Liverpool (6), Barcelona (5), Ajax (4), Inter, (3), Manchester United (3), Juventus (2), Benfica (2), Chelsea (2), Nottingham Forest (2), Porto (2), Borussia Dortmund (1), Hamburgo (1), Celtic Glasgow (1), Olympique de Marsella (1), Steaua Bucarest (1), Aston Villa (1), PSV Eindhoven (1), Feyenoord (1) y Estrella Roja (1).
El City no pudo desarrollar el fútbol que lo condujo a Estambul, aspecto atribuible como mérito a un aplicado Inter, que ejecutó su plan de juego como lo pensó el DT Simone Inzaghi.
Los italianos cerraron las líneas de pase a los mediocampistas rivales, ejercieron una inteligente presión organizada por el croata Marcelo Brozovic e intentaron dañar con un juego directo, en el que sobresalió Federico Dimarco por el carril externo de la izquierda.
La tenencia del Manchester se expresó lejos del arco de Onana, con todos los adversarios detrás de la línea de la pelota, sin libertad para los posibles receptores de Rodrigo, quien estuvo a cargo de la salida.
Haaland sólo pudo encontrarse una vez con De Bruyne; Bernardo Silva quedó aislado por la derecha; Jack Grealish fue controlado por Denzel Dumfries y Gundogan tampoco gravitó en el juego interno como ocurrió en los anteriores partidos.
Como hace dos años en la final ante Chelsea en Lisbao, De Bruyne salió lesionado y la dejó su lugar a Phil Foden, más veloz en sus movimientos pero sin generar cambios en el curso del juego.
Inter, siempre más cómodo con las condiciones del partido, tuvo a todos sus futbolistas en un alto grado de concentración para equilibrar fuerzas a priori favorables al rival.
Lautaro jugó lejos del arco de Ederson y no pudo combinar con sus compañeros en la medida de lo necesario para generar oportunidades de gol en las transiciones ofensivas de su equipo.
El juego por momentos se hizo lento, una característica que preocupaba más al City que a Inter, preparado para un partido largo.
En los primeros minutos de la parte final, con la sensación de partido controlado por parte de los italianos, Pep Guardiola pidió el aliento de los fanáticos británicos que coparon la mitad del estadio Atatürk.
El español buscaba un factor de motivación para sus jugadores, que no lograban conectarse en la cancha y se miraban por momentos con rostros de frustración.
En ese momento, Inzaghi apostó por el belga Lukaku, el mejor socio para Lautaro, quien ingresó a los 11 minutos por Dzeko. Enseguida, Inter tuvo una ocasión clara que el arquero le tapó al argentino después de una mala entrega hacia atrás de Bernado Silva.
La expectativa por el ingreso de Julián Álvarez comenzaba a incrementarse en la noche turca cuando el marcador se inclinó inesperadamente para los británicos.
Manuel Akanji condujo hasta cercanías del área, detectó un espacio en el área entre Bastoni y Dimarco, Bernardo recibió con ventaja, envió un centro atrás y Rodrigo acertó con un remate certero de cara interna.
De inmediato Inter dispuso otra doble ocasión en la cabeza de Dimarco pero el travesaño primero y el propio Lukaku después, con un bloqueo involuntario, impidieron la caída del arco de Ederson.
Sobre el final, en un desenlace dramático, el brasileño tuvo un par de intervenciones memorables para sostener la victoria. A los 43 le tapó el gol a Lukaku y en la última jugada del partido rechazó un cabezazo de Gosens con todo el rival dentro del área.
Síntesis
Manchester City: Ederson Moraes; Manuel Akanji, Rúben Dias, Nathan Aké; Jhon Stones, Rodri, Ilkay Gündogan, Kevin De Bruyne; Bernardo Silva, Jack Grealish y Erling Haaland. DT: Josep Guardiola.
Inter de Milán: André Onana; Matteo Darmian, Francesco Acerbi, Alessandro Bastoni; Denzel Dumfries, Federico Dimarco, Marcelo Brozovic, Nicolo Barella, Hakan Calhanoglu; Lautaro Martínez y Edin Dzeko. DT. Simone Inzaghi.
Gol en el segundo tiempo: 23m. Rodrigo (MC)
Cambio en el primer tiempo: 35m. Phil Foden por De Bruyne (MC). En el segundo tiempo: 11m. Romelu Lukaku por Dzeko (I); 30m. Robin Gosens por Bastoni y Raoul Bellanova por Dumfries (I); 36m. Kyle Walker por Stones (MC); 39m. Henrikh Mkhitaryan por Calhanoglu y Danilo D’Ambrosio por Darmian (I);
Amonestado: Barella, Lukaku y Onana (I). Ederson y Haaland (MC).
Estadio: Estadio Olímpico Atatürk, Estambul, Turquía.
Árbitro: Szymon Marciniak (Polonia).
VAR: Tomasz Kwiatowski (Polonia) .