Un grupo de investigadores de la Universidad de Cincinnati encontraron evidencias en la antigua ciudad de Tikal. Los profesionales aseguraron que este sistema todavía sería efectivo
Los mayas construyeron, con materiales naturales, sistemas de filtración de agua parecidos a los modernos, según descubrieron investigadores de la Universidad de Cincinnati (Estados Unidos) a partir de evidencias halladas en la antigua ciudad de Tikal, en Guatemala.
El equipo multidisciplinario de la mencionada casa de estudios encontró cuarzo de cristal y zeolita, minerales que se utilizan para purificar el agua hoy en día, que fueron llevados a la zona desde kilómetros de distancia para, presuntamente, eliminar del agua los microbios nocivos, compuestos nitrogenados y metales pesados, como el mercurio y otras toxinas.
«Probablemente, fue a través de una observación empírica muy inteligente que los antiguos mayas vieron que este material en particular estaba asociado con el agua limpia e hicieron algún esfuerzo para llevarlo allí», afirmó Nicholas Dunning, profesor de geografía y uno de los autores del estudio.
El experto detalló que los mayas tenían «tanques de sedimentación donde el agua corría hacia el depósito antes de entrar en él».
«Lo interesante es que este sistema todavía sería efectivo hoy y los mayas lo descubrieron hace más de 2.000 años», añadió Kenneth Barnett Tankersley, profesor asociado de antropología y autor principal de la investigación. Además, el científico subrayó que este sistema de tratamiento de agua es uno de los más antiguos de su tipo en el mundo.
Para los antiguos mayas, encontrar formas de recolectar y almacenar agua limpia era de importancia vital, ya que Tikal y otras ciudades se construyeron sobre una piedra caliza porosa que hacía difícil el acceso al agua potable durante gran parte del año por las sequías estacionales.