El jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, avaló la decisión del presidente Alberto Fernández de decretar un confinamiento total durante nueve días en todo el país ante la suba de casos de coronavirus. Es que Larreta cambió de opinión y decidió suspender las clases presenciales hasta el 30 de mayo. Así lo confirmó el alcalde porteño en conferencia de prensa, al indicar que «todos estamos preocupados por el avance del virus en toda la Argentina».
Sobre las clases presenciales, Larreta lo denominó un «corrimiento» del calendario escolar: esto es que los días miércoles, jueves y viernes de la semana que viene los chicos no van a tener clases y esos tres días van a ser recuperados de manera presencial del 20 al 22 de diciembre. «Así como lo último que estamos cerrando son las escuelas, reafirmo una vez más mi compromiso que lo primero que se van a abrir son las escuelas», expuso el jefe de Gobierno porteño.
Durante la conferencia, el jefe de Gobierno porteño remarcó la crítica situación epidemiológica en la Ciudad, al comentar el incremento de la tasa de contagios en un promedio de 2.500 casos nuevos, «incluso con algunos picos por encima de 3.000» «Esto es algo que nos genera especial preocupación, sobre todo teniendo en cuenta que la ocupación de camas de terapia intensiva se encuentra en un 83% en el sector público», remarcó Larreta. El alcalde porteño argumentó que la Ciudad apoyará la estrategia sanitaria en tres pilares: el fortalecimiento de salud (aunque no anunció ninguna medida específica); el plan de vacunación; y la responsabilidad individual. Sobre ese punto, Larreta insistió «usar el tapabocas, mantener la distancia, evitar los encuentros en lugares cerrados y cumplir los protocolos de cada actividad».
Además el Gobierno porteño confirmó que a partir del fin de semana buscará reforzar los controles vehiculares en los ingresos a la Ciudad de Buenos Aires, al cerrar 71 de los 127 que de los accesos en la Capital Federal. También se remarcó que estará abierta la línea 911 para que se pueda denunciar cualquier irregularidad.
Por su parte, tal como anunció el Gobierno nacional, estarán prohibidos los encuentros sociales, tanto en espacios abiertos como en espacios cerrados y en todos los ámbitos. Los comercios esenciales segurán abiertos, los no esenciales solo podrán trabajar de «la puerta para afuera», tal cual adelantaron en la Casa de Gobierno porteña. Por su parte, los locales gastronómicos podrán trabajar en la modalidad de delivery o retiro en el local. «Somos conscientes de que son medidas difíciles después de muchos meses duros, pero es lo que necesitamos en este momento para contener la situación sanitaria en paralelo con avanzar fuertemente con la vacunación», dijo Larreta, acompañado por su vice Diego Santilli, y los ministros Soledad Acuña, Fernán Quirós y Felipe Miguel.