"Si la actividad no se recupera, el gran temor es qué pasa con los puestos de trabajo", enunciaron desde la Unión Industrial Argentina
La Unión Industrial Argentina (UIA) sostuvo este sábado que en el sector hay «preocupación» por la «destrucción de empleo formal» ante la crisis por el coronavirus y advirtió que «si la actividad no se recupera, el gran temor es qué pasará con los puestos de trabajo».
«La preocupación mayor es la destrucción de empleo formal y mucho de esto desliza la informalidad», subrayó el vicepresidente de Asuntos Laborales e internacionales de la entidad, Daniel Funes De Rioja.
De ese modo, señaló: «Seguramente, estemos en una tasa de 40 por ciento de informalidad», por lo que llamó a «repensar su esquema tributario desde el punto de vista laboral y todos los costos laborales».
«La pandemia y, consecuentemente, las medidas que han tenido que adoptarse, produjo una fenomenal contracción de la actividad económica», argumentó el también titular de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL).
Según puntualizó Funes De Rioja, «hay sectores que hoy están golpeados más del 75 por ciento».
En declaraciones radiales, destacó: «Es la inversión y el crecimiento del sector privado en todas sus dimensiones lo que va a hacer al desafío del crecimiento que la Argentina tiene».
Por su parte, el director ejecutivo y economista jefe de la UIA, Diego Coatz, remarcó que los empresarios del sector están «preocupados» ante la crisis.
«Si la actividad no se recupera, el gran temor es qué pasa con los puestos de trabajo», apuntó y afirmó: «Habíamos visto un pequeño repunte a fines de mayo y principios de junio y ahora que se volvió a una fase de aislamiento más dura, el consumo va a ser menor».
Al referirse a los sectores más afectados en medio de la pandemia, evaluó: «Todo lo que tiene que ver con consumo en comercios tradicionales, textil, gráfico, calzado y en menor medida automotriz, ha caído fuertemente».
«Está mejorando lentamente lo vinculado con la construcción porque en el interior del país se empieza a reactivar algo», consideró Coatz.
«Lo que más preocupa son las pymes del conurbano porque hay problemas para producir y se está moviendo muy poco el consumo», resaltó.