La soledad es un sentimiento subjetivo que difiere entre grupos etarios y países. Es un problema que crece cada vez más
Una noticia conmocionó a todo los Países Bajos. Una mujer de 74 años de edad fue encontrada sin vida en el pasillo de su casa de Rotterdam. Lo extraño fue es que hace diez años que estaba ahí.
«Nadie se dio cuenta», dijo a Euronews un portavoz del Ministerio de Salud holandés, Axel Dees. «Fue una gran conmoción que, en una gran ciudad, una persona lleve muerta 10 años y nadie les eche en falta».
La mujer fue hallada en 2013 cuando empleados públicos vieron cartas apiladas en su puerta y llamaron a la policía. El descubrimiento hizo que Hugo de Jonge entrara en acción.
Hugo de Jonge, quien trabajaba en el ayuntamiento Rotterdam, creó un plan local para enfrentar la soledad. Ahora, es ministro de salud holandés y la estrategia se extendió a todo el país.
No sólo están tomando medida en los Países Bajos. El Reino Unido nombró a su primer Ministro de la Soledad y toda Europa comienza a intentar enfrentarse al problema.
La soledad en Europa
Uno de los mayores problemas a los que se enfrentan los expertos para saber si se trata de un problema creciente en todo el Viejo Continente es la escasez de datos comparativos.
En primer lugar, la soledad es un sentimiento subjetivo que difiere entre grupos etarios y países. En segundo lugar, si bien se han realizado estudios, éstos son relativamente recientes, por lo que es difícil saber si la soledad esté empeorando.
Un informe de la Comisión Europea señaló que la soledad afecta al 7% de los adultos en Europa. Los habitantes de países del este y del sur afirmaron que sufren más soledad que los de las zonas occidentales y septentrionales.
Italia, los Países Bajos y Francia son los países en los que más porcentaje de habitantes se siente aislado. En una encuesta de 2015, los tres superaron la media de la Unión Europea. La gente era consultada si tenían a alguien a quien pedir ayuda o con quien discutir asuntos personales.
Sin embargo, como muestra el gráfico, hay países en los que los ciudadanos sienten que pueden pedir ayuda relativamente fácilmente, pero no hablar de asuntos personales, como en Francia. Otros, como en Portugal, no tienen problemas tantos problemas para encontrar alguien con quien hablar pero les es más difícil a la hora de pedir ayuda, como Luxemburgo o Portugal.
La soledad, ¿un problema que sólo afecta a los ancianos?
Un conmovedor video se hizo viral en Reino Unido. Unos estudiantes fueron a la casa de un jubilado a cantarle villancicos, y el adulto se largó a llorar.
Terrence, de 78 años, había pasado todas las Navidades de este siglo solo, lo que llevó a un presentador de la BBC a organizarle un concierto de villancicos a domicilio.
Su situación no es atípica: 1,4 millones de personas mayores de 50 años en Inglaterra informan que se sienten solos con frecuencia, según la organización Age UK.
Los expertos dicen que la proporción de personas mayores que se sienten solas no ha cambiado, pero el número total aumentó porque la gente vive más tiempo.
Axel Dees dice que a medida que las personas envejecen tienen menos lazos sociales: su trabajo se detiene y se corta una red de amigos.
«Lo que vemos es que las cifras entre las personas mayores son realmente enormes», dijo. «No tienen una forma natural de mantenerse en contacto con los demás.
«Es cierto que los hijos tienden a vivir más lejos de sus padres, por lo que las personas mayores tienen menos contacto con sus ellos y eso es también una causa de soledad».
Pero mientras que las iniciativas para abordar la soledad se centran en los ancianos, otros grupos de edad se ven más afectados, según la ex eurodiputada Judith Merkies.
Merkies dijo a Euronews que un estudio en Alemania había revelado que los hombres jóvenes eran los más solitarios y que el problema estaba aumentando en las mujeres jóvenes.
«Muchas de las iniciativas tienden a centrarse en los ancianos, existe esta idea preconcebida de que si eres viejo y frágil te sientes solo», dijo Merkies, que fundó Loneliness in Europe en 2018 para ayudar a abordar el problema.
«Estas iniciativas dirigidas a los solitarios son muy bonitas, pero ¿Por qué tenemos estas ideas preconcebidas sobre lo que es ser anciano, que ser mayor sería completamente diferente del resto de tu vida?».
Las causas de la soledad: pobreza, salud y aislamiento
Los investigadores dicen que la mala salud, vivir solo y ser pobre son todos factores que aumentan el riesgo de estar solo.
«Pero el factor más importante es el carácter y la capacidad de conectar con otras personas», dijo Merkies a Euronews.
«Los factores vinculantes pasado han desaparecido un poco, como la iglesia y la escuela que se situaban en el centro de la ciudad y en el de la vida de las personas. Hay una presión por la productividad. En el pasado, se podía estudiar durante mucho tiempo, pero ahora esto ha cambiado debido a factores financieros. Cada vez hay más una división entre los que trabajan y los que tienen medios económicos y los que no. La familia es extremadamente importante. La gente está más desconectada si tiene que mudarse por el lugar donde está el trabajo.»
Robin Hewings, director de acciones de la Campaña para Acabar con la Soledad, dice que uno de los mayores riesgos viene durante las transiciones clave de la vida.
«Si uno se muda a un nuevo trabajo o a una educación que puede ser un gran cambio, particularmente con los jóvenes, a menudo sus grupos de amigos se mueven y cambian mucho más y eso puede ser un riesgo real», dijo.
«Otro riesgo es justo después de haber tenido hijos. Ibas a salir a trabajar y toda esa interacción social y luego tu trabajo y tu vida social cambian radicalmente y tienes un bebé que grita y puede ser un momento duro y solitario».
Más allá de las transiciones de la vida los expertos también apuntan a la influencia -negativa pero también positiva- de las nuevas tecnologías.
«Sin duda existe un riesgo con cosas como Facebook e Instagram, donde la gente está poniendo su mejor cara y la comparación social puede hacer que se sientan más solos», dijo Hewings.
«Por otro lado, son herramientas realmente útiles para ayudar a mantener las relaciones sociales. Si uno piensa en hace 60 años, si su hijo se mudaba a Australia probablemente no lo volvería a ver. Pero ahora puedes hablar con ellos a través de Skype o de una videollamada. Hay oportunidades de abordar la soledad a través de la tecnología digital: puede ayudar a las personas a encontrar cosas que les interesan, personas con las que quieren conectarse o ayudar a mantener relaciones».
El ejemplo del programa holandés
Más de 700.000 personas mayores de 75 años en los Países Bajos se sienten solos y si el país no actúa, podría llegar a ser un millón en 2030. Hace dos años, el gobierno invirtió 26 millones de euros en un programa que tenía como objetivo concienciar sobre el problema y la urgencia de abordarlo.
Ha alentado a asociaciones y voluntarios a abordar el problema y a compartir sus ideas. Una de las iniciativas más conocidas es la de Ámsterdam, donde se ofrece a los estudiantes un alojamiento más barato o gratuito si viven y se relacionan con personas mayores.
Algunos municipios han empezado a escribir cartas a personas mayores de 75 años cada año y a ofrecerse para ir a tomar un café.
En otros lugares, algunos supermercados han creado «cajas parlanchinas» especiales para servir a las personas mayores que utilizan su viaje semanal de compras como una ocasión de intercambio social y no quieren sólo entrar y salir corriendo.
Otras empresas han formado a su personal para que reconozca los signos de soledad entre sus clientes.
Dees dijo a Euronews: «Los trabajadores del servicio postal se dieron cuenta de que algunas personas mayores pedían específicamente muchos paquetes – medicinas o atención médica en línea, y sospechaban que era sólo para recibir al cartero una vez por semana un paquete que en realidad no necesitaban. Como se trataba de una actividad social para ellos, se limitaban a tener una charla con el repartidor».
Entonces, ¿qué efecto está teniendo el esquema holandés?
«Lo maravilloso es que vemos realmente que hay un amplio movimiento que comienza en los Países Bajos para luchar contra este enorme problema social», dijo Dees. «Es realmente difícil decir cuál es el efecto de esto. Tal vez incluso la soledad está aumentando porque la gente es más consciente. Pero lo maravilloso es que lo que ves es que la sociedad realmente se preocupa y quiere cambiar esto».
¿Qué podemos hacer para enfrentar la soledad?
La Navidad para muchos está centrada en familia y amigos. También es tradicional preocuparse algo más por los que están solos o hacer alguna acción solidaria. Pero aunque esto es útil, los expertos se esfuerzan por señalar que la soledad no sólo se produce durante el período festivo.
«Nos preocupamos por la soledad especialmente en Navidad», dijo Hewings. Pero ocurre todo el año. El verano puede ser una época particularmente solitaria con toda le gente que se va de vacaciones.»
Merkies dijo que los individuos deben comenzar actuar en sus círculos sociales inmediatos, mientras que los gobiernos tienen que asegurarse asegurar que los jóvenes sean educados sobre cómo prepararse para la vida, capacitarles para establecer relaciones sociales saludables.
«Educamos a los jóvenes para que sean capaces de hacer matemáticas, de hablar idiomas, pero no les decimos cómo interrelacionarse. Tenemos que decirle a la gente lo que es conectarse con los demás. ¿Cuales son las claves? Y también dar un poco de visión de la realidad en cuanto a cómo relacionarse porque en Facebook y en Internet solemos ver cuentos de hadas que no existen en la vida real.»
«Si quieres conectarte con otras personas tienes que mostrar un interés real, tender la mano, mostrar tu vulnerabilidad y trabajar, tienes que poner horas y esfuerzo.»
«Empieza por la educación, prepara cómo vamos a construir nuestras ciudades tan complicadas para las conexiones sociales en el futuro. Porque si todos estamos viviendo en unidades individuales, trabajando haciendo ‘clic’ en Internet, tal vez la única persona que que vamos a ver es el repartidor de Amazon con un paquete. Así la vida va a ser muy solitaria.»
«La economía en línea está canibalizando lentamente la economía física en nuestras ciudades, así que ya no tenemos tiendas y nuestros teatros están bajo presión. ¿Cómo se comunican, cómo se encuentran cuando ya no tienen una razón para ir a la ciudad?» dice Merkies.
Con información de EuroNews