Las fuerzas de seguridad egipcias mataron a 19 presuntos terroristas vinculados con el ataque contra un ómnibus con cristianos coptos que causó la muerte de 7 personas el viernes pasado.
«Tras irrumpir en la zona y cercarla, los elementos terroristas empezaron a disparar a las fuerzas de seguridad, las cuales respondieron», informó el Ministerio del Interior egipcio en comunicado sobre el operativo en el que además reportó que los presuntos terroristas «todavía no fueron identificados».
La redada tuvo lugar en una zona «remota» en el desierto occidental de la provincia de Minia, en el centro de Egipto, «un refugio lejos del radar de las fuerzas de seguridad», indicó.
La Policía requisó «seis ametralladoras, dos fusiles automáticos de tipo FN FAL, tres rifles, cuatro pistolas y munición», precisó el comunicado oficial.
La televisión estatal egipcia difundió varias imágenes de los cadáveres de varios de los muertos de manera individualizada, todos con un arma de fuego cerca de los brazos de los cuerpos sin vida, y un papel impreso con el lema del Estado Islámico (EI) dentro de una carpa en el desierto.
La operación policial ocurrió dos días después de que el EI asumiese la autoría de un ataque contra cristianos coptos en la misma provincia donde hoy mataron a los supuestos yihadistas, informó la agencia de noticias EFE.
En el atentado del viernes contra un ómnibus en el que viajaban fieles cristianos hubo siete muertos y 19 heridos.
Ese atentado fue cometido en el mismo sitio en el que en mayo de 2017 miembros del EI asaltaron otro autobús con cristianos con el resultado de 28 muertos.