Durante las primeras tres noches de operativos, según indicó la titular de la cartera de Seguridad, se labraron 250 actas de infracción
La ministra de Seguridad, Sabina Frederic, aseguró hoy que en las primeras tres noches de operativos de las fuerzas de seguridad para controlar las restricciones a la circulación en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se labraron 250 actas de infracción, lo que demuestra «un alto nivel de acatamiento» a las medidas dispuestas por el presidente Alberto Fernández para mitigar el avance de los contagios por el coronavirus.
Además, la funcionaria nacional explicó en declaraciones radiales que, de acuerdo a los informes proporcionados por las oficinas de transporte de las autopistas, «descendió la circulación vehicular aproximadamente un 50 por ciento» respecto a marzo.
«Reforzamos el despliegue que veníamos desarrollando desde el 9 de abril, cuando el Presidente dispuso las primeras medidas por el avance de los contagios. Ese refuerzo que implantamos el viernes funcionó hasta ahora tres días y muestra un alto nivel de acatamiento», dijo Frederic a FM Rock & Pop.
La ministra explicó que el control que realizan las fuerzas de seguridad federales «es fijo y permanente entre las 20 y las 6 de la mañana del día siguiente» y que es aleatorio en el control de los medios de transporte públicos entre las 6 y las 20.
«Recorrí varios controles, en la ruta 8, en la ruta 9, en la autopista Riccheri, en el Acceso Oeste. lo hice por tierra y se ve una merma muy significativa de vehículos», dijo la funcionaria, quien aclaró que «el trabajo que hacen los integrantes de las distintas fuerzas de seguridad es de concientización», aunque destacó que «se han labrado 250 actas de infracción».
Por otra parte, si bien aseguró que en estos días disminuyó la cantidad de delitos registrados en horario nocturno por la menor circulación en las calles, reconoció que aumentaron los robos y hurtos registrados entre las 6 y las 8 de la mañana, cuando se levantan los controles de restricción a la circulación.
«Por eso, nuestros dispositivos de control se convierten en dispositivos de patrullajes para evitar los robos y arrebatos», dijo Frederic, quien explicó que durante el año pasado, debido a las distintas modalidades de cuarentenas por el coronavirus, «hubo un descenso del 30 por ciento en la tasa del robo, pero se incrementó el nivel de violencia en algunos distritos».
Y puso como ejemplo la Ciudad de Buenos Aires, «donde hubo un descenso del 40 por ciento en los robos y hurtos y un incremento del 22 por ciento de los homicidios».
«A nivel país, descendieron el 30 por ciento los robos y se registró un incremento de 1 por ciento de los homicidios», dijo.