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La brutal depredación de la milla 201 por parte de barcos extranjeros


Muchos barcos extranjeros se adentran lisa y llanamente en aguas argentinas. Esta grave situación que daña el patrimonio nacional es permanente y se agrava

La pesca ilegal es un tema que preocupa en Argentina. Hace algo más de un mes, en un vuelo organizado por el piloto, cineasta y médico Enrique Piñeyro, se grabó un video que muestra imágenes impresionantes de la cantidad de buques pesqueros extranjeros que depredan los recursos ictícolas argentinos. Y la pregunta sigue estando latente: ¿qué ocurre en el Mar Argentino y cuáles son las medidas necesarias?

Lo que se vio en las imágenes es un problema que azota al país: la pesca ilegal en el Mar Argentino. Por lo que es necesario avanzar en las acciones de respuesta, que no se limitan exclusivamente a tener una política nacional.

«Lo dije en Twitter. Sobre el mar procedente de Ushuaia con destino a Ezeiza, lo que parece la luna es la luna y lo que parece la costa de Nueva York es la flota pesquera», contó el piloto, mientras sobrevuela «las 200 millas», el punto más caliente de la pesca ilegal en el Mar Argentino.

Esta depredación representa un robo de recursos de US$ 2.000 millones al año por la pesca ilegal. Más las consecuencias ambientales, según indica una publicación de Clarín.

«Ahí es donde terminan nuestras aguas y comienzan las internacionales. Ahí es donde se acaba la llamada Zona Económica Exclusiva, que los buques extranjeros cruzan sin control para llevarse el calamar a sus países. Y no es sólo China. También vienen de Corea y de España», contó Piñeyro.

Si bien no hay datos oficiales, se estima que los barcos -algunos de 70 metros- tienen la capacidad de pescar 50 toneladas de calamar por noche. No son «barcos fantasmas», son barcos que parecen tiras de led.

Sobre si el Gobierno nacional ha tomado medidas al respecto, Piñeyro afirmó que «no hace nada. Pero no hizo nada el Gobierno anterior, ni el anterior. Hace 40 años que vuelo y estoy viendo que lo que anteriormente era una ‘manchita’ ahora es una ciudad. Estas cosas sólo pueden pasar si nadie controla».

¿Qué pasa entre las millas 199, 200 y 201?

La Ley 23.968 de Espacios Marítimos define que la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de la Argentina se extiende, más allá del límite exterior del mar territorial, hasta una distancia de 200 millas marinas a partir de las líneas de base establecidas. Sobre ese espacio -conforme se describe en la iniciativa nacional Pampa Azul, conformada por funcionarios de varios ministerios– es que el país ejerce soberanía con derechos de exploración, explotación, conservación y administración sobre los recursos vivos y no vivos, según refleja el portal www.chequeado.com.

“Están alambrando”, así se denomina en la jerga a los buques extranjeros que esperan en la milla 201, o incluso sobre el límite. “No es que hay toda una flota entera pescando dentro del Mar Argentino”, explicó Milko Schvartzman, especialista en conservación marina y parte del equipo del Círculo de Políticas Ambientales, y argumentó: “Los buques extranjeros también tienen radares y están mirando si se acerca un barco de Prefectura Naval. Cuando saben que no hay vigilancia próxima, aprovechan para ingresar, porque el recurso es más abundante adentro del Mar Argentino”.

Schvartzman realizó un conteo propio de la cantidad de buques extranjeros que se encuentran al acecho. Contabilizó 460 barcos. Al estimar que un 20% de los barcos apagan el Sistema de Identificación Automática (AIS) -que, a través de ondas de radio, transmite la posición del barco, y cuyo encendido es obligatorio- para no ser identificados, esa cifra ascendería a 550. La gran mayoría de esos barcos son poteros.

Las luces que se suelen observar en este tipo de vuelos no corresponden únicamente a flota extranjera. En el límite, pero dentro del Mar Argentino, también se encuentran los buques locales. Según los Informes de Cadena de Valor del Ministerio de Hacienda de la Nación a junio de 2019, los moluscos representaron el 13% de las capturas nacionales, con una participación relativa del calamar Illex equivalente al 16%, detalla Chequeado.

Luego del langostino y la merluza Hubbsi, el calamar Illex es el tercer mayor producto exportado por la Argentina, siendo sus principales mercados de destino España, China y Tailandia. De allí, tal como sostuvo Schvartzman, la competencia negativa en términos económicos que supone toda pesca ilegal de esa especie en Mar Argentino.

Mientras los barcos extranjeros se encuentran más allá de la milla 200, el país no puede hacer nada al respecto. Cuando cruzan el límite e ingresan al Mar Argentino, ahí es cuando se considera la ilegalidad de su pesca.

Así lo explica Andrés Nápoli, abogado y director ejecutivo de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN): “Si el barco está en la 201 no corresponde que la Argentina lo evalúe como en situación de ilegalidad, porque nadie le puede otorgar un permiso de pesca a la milla 201. A nivel internacional, tampoco hay ninguna sanción porque no es posible saber cuál es su intención. Ellos pueden dar múltiples excusas: que el barco derivó, que el viento lo arrastró más allá de lo previsto, que se hizo una mala maniobra”.

Cómo se controla la situación

Cuando un barco extranjero, sin permiso alguno, ingresa en superficie marítima argentina y es identificado por la Prefectura Naval Argentina, se procede con el protocolo: se lo detiene, se inicia una inspección a bordo y se realiza la captura en bodega. En caso de resistencia y previa autorización de Cancillería, se procede a disparar, primero al agua. En cambio, si salen de la milla 200, no se puede hacer uso de la fuerza.

Según datos oficiales, desde 1986 a 2020 Prefectura capturó 80 buques, 15 de ellos de bandera de Corea del Sur, 12 de China, 11 de Taiwán y 11 de España. Dos de estos 4 países (China y España) son los principales destinos de las exportaciones de pesca argentinas.

Las acciones necesarias para intentar dar una solución a la problemática histórica en el Atlántico Sur son un mayor patrullaje en la zona, establecer a la pesca ilegal como delito penal, lograr un nuevo acuerdo internacional y quita de subsidios.