El máximo líder norcoreano Kim Jong Un, sonriente y jovial, llegó este martes a Vietnam tras un largo periplo en tren a través de China, recibido con alfombra roja en la estación de Dong Dang, donde le esperaban niños con banderas y una guardia de honor con uniformes de un blanco impoluto.
Kim, vestido con su tradicional traje oscuro con cuello Mao, bajó de su tren blindado sonriente, saludando con la mano y rodeado por sus colaboradores y personal de seguridad.
Al salir de la estación de tren de Dong Dang, localidad en la frontera vietnamita con China, Kim Jong Un fue saludado por una fanfarria militar. Una multitud de periodistas lo había esperado toda la noche bajo una fría lluvia.
Al bajar del tren y dirigirse a los respresentantes vietnamitas, su intérprete se vio obligado a correr detrás suyo para traducir las palabras de bienvenida.
El tercer Kim en el poder en Corea del Norte se subió luego a un Mercedez-Benz y saludó desde la ventanilla del coche, que incluso se detuvo ante unos niños con uniforme escolar que agitaban sonrientes bandera norcoreanas y vietnamitas.
Mientras el coche del dirigente norcoreano dejaba la estación para dirigirse a Hanói, donde el líder se reunirá con el presidente estadounidense Donald Trump, doce guardaespaldas trotaron a su lado para luego subirse al convoy.
Unos veinte coches recorrieron los 170 km desde Dong Dang hasta Hanói, escoltados por motos de la policía y vehículos de seguridad.
En Hanói, los habitantes que acudieron a la llegada del convoy saludaron al dirigente norcoreano, quien se alojará en un moderno hotel en el centro de la capital.
Todo fue muy rápido
La llegada de Kim a la pequeña estación de Dong Dang alteró por completo a la localidad fronteriza.
Hoang Thi Thuy, responsable del sindicato de mujeres de Dong Dang, explicó que esperó bajo la lluvia desde el alba la ocasión de poder ver al líder norcoreano.
«Estábamos tan contentos que nos dijeron que esperáramos la llegada del tren», contó a la AFP. «Vimos al líder de lejos. Estaba tan contenta, es difícil describirlo», añadió.
Nong Thi Ghi, de 33 años, que trabaja en el liceo local Cao Loc, relató que el momento en que Kim Jong Un caminó sobre la alfombra roja fue el más memorable. «Cuando el coche se fue, sentí tristeza, todo pasó tan rápido», lamentó.
La hermana del dirigente norcoreano Kim Yo Jong, una de sus colaboradores más cercanos, forma parte de la comitiva. El jefe del gabinete del líder, Kim Chang Son, apodado «el mayordomo», también fue visto en la estación.
Éste es el primer viaje de Kim Jong Un a Vietnam, país con un régimen unipartidista. Es también la primera vez que un dirigente norcoreano viaja a esta nación desde la visita en 1964 de su abuelo Kim Il Sung, aliado cercano al líder revolucionario vietnamita Ho Chi Minh.
Para los observadores, el dirigente norcoreano quiso enviar un mensaje al viajar en tren: mostrar que sigue los pasos de su abuelo, a quien le copia a veces su andar, sus maneras, e incluso su escritura.
«Es un mensaje fuerte para los norcoreanos, que Kim Jong Un heredó las calidades de su abuelo, que la dinastía Kim está más fuerte que nunca», comenta Koh Yu-hwan, profesor de la universidad Dongguk de Seúl.
Kim visitará en Vietnam dos provincias de un país del que observa su modelo económico y citado como ejemplo por Washington por su recuperación económica luego de la guerra.