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El juicio contra Cristina Kirchner pasó a cuarto intermedio hasta el lunes


Foto: Gentileza Clarín

El primer juicio oral contra la ex presidenta Cristina Kirchner, en el marco de una causa que investiga presuntas irregularidades en la obra pública, pasó a cuarto intermedio hasta el próximo lunes, de acuerdo a lo dispuesto por los jueces del tribunal oral federal 2.

En una audiencia colmada, que incluso obligó a que se habilitara otra sala contigua para el público, el juicio comenzó pasadas las 12 del mediodía con la presencia de la ex mandataria, quien se sentó detrás de los ex funcionarios Julio De Vido, José López y el dueño de Austral Construcciones.

Después de casi tres horas, los magistrados decidieron finalizar la jornada y pasar a un cuarto intermedio hasta la próxima audiencia, el lunes 27 de mayo a las 9:30.

La senadora nacional estaba ubicada en la última fila de la Sala AMIA de los Tribunales Federales de Comodoro Py, al lado del sector designado para el público, en donde había dirigentes sindicales, legisladores y referentes de organismos de derechos humanos. A la derecha de la referente opositora se encontraba su abogado, Carlos Beraldi.

El primer juicio a la ex mandataria se inició a las 12 con la lectura de las acusaciones en la Sala Amia, la más amplia del edificio judicial de Comodoro Py 2002, y según fuentes judiciales ese trámite puede demandar más de tres jornadas, en las que todos los acusados tendrán la obligación de estar presentes.

El Tribunal está integrado por los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso, mientras que Adriana Palliotti interviene como jueza sustituta, aunque esta última no estaba presente debido a que lleva adelante otro juicio.

En la pimera audiencia, el presidente del Tribunal, Gorini, pidió a los imputados estar atentos al juicio y fue cruzado por el abogado Maximiliano Rusconni, defensor de De Vido, quien intentó formular un planteo pero el juez le dijo que no era el momento y que se debía dar comienzo a la lectura del requerimiento de elevación a juicio.

El rechazo del magistrado se debió a que que aún quedan pendientes planteos de las partes que la Corte Suprema de Justicia no resolvió y que apuntan a decretar la nulidad del juicio. Así, el secretario del Tribunal comenzó a dar lectura del requerimiento hecho por los fiscales Gerardo Pollicita y Juan Ignacio Mahiques con el cual la causa pasó a etapa de juicio oral y público.

La senadora y ex presidenta, su ministro de Planificación, Julio De Vido; Lázaro Báez y otros diez acusados serán juzgados por la supuesta comisión de los delitos de asociación ilícita y de administración fraudulenta en perjuicio de una administración pública.

En el juicio se evalúa cómo fue la adjudicación de 51 obras viales a empresas de Lázaro Báez en Santa Cruz, donde hubo una presunta concentración en detrimento de otros estados provinciales: en la actualidad está en curso una pericia a cargo de expertos contadores de la Corte Suprema de Justicia sobre cinco de ellas para determinar si existieron sobreprecios.

Pasadas las 11.10 la actual senadora, y precandidata a vicepresidenta en la fórmula que encabeza Alberto Fernández, se subió a un vehículo y sin dar declaraciones a la prensa, aunque sí saludando a los cientos de militantes que llegaron hasta su casa a despedirla, partió hacia Tribunales, donde se sentó en el banquillo por primera vez.

«Bendita seas». Esa fue una de las tantas frases que pudo oír Cristina Kirchner en los segundos desde los que salió de su casa y se subió a un auto para partir rumbo a los tribunales de Comodoro Py, en donde enfrenta el juicio en su contra por el supuesto direccionamiento de la obra pública vial en Santa Cruz durante sus dos mandatos como presidenta de la Nación.

«Esto es un nuevo acto de persecución con un único objetivo: colocar a una ex presidenta opositora a este gobierno en el banquillo de los acusados en plena campaña presidencial”, había escrito CFK en su cuenta de Twitter.