Italia sigue en estado shock tras la violación y el asesinato de Desirée Mariottini, una joven de 16 años que fue violada por una decena de hombres durante diez horas antes de morir asfixiada en un edificio romano conocido como «La Casa de las Drogas».
La investigación apunta a que la menor vendió su teléfono móvil para comprar drogas y que posteriormente acudió al lugar donde fue asesinada con la intención de recuperarlo. Las autoridades han establecido que la menor fue violada por una decena de hombres, muchos de ellos inmigrantes ilegales, desde la tarde del 18 de octubre hasta la mañana siguiente, cuando murió asfixiada, presumiblemente para evitar que gritase durante la violación en grupo.
La muerte de Desirée copó las portadas de la prensa italiana estos días, y reavivó el debate sobre la inmigracion ilegal, llevando al ministro derechista Matteo Salvini a asegurar que hará todo lo que sea para dar con “estos gusanos culpables de este horror” y que “pagarán hasta el final su infamia”.
En su visita a la zona, Salvini ha prometido el cierre de estos edificios abandonados ocupados por inmigrantes ilegales. «He pedido al fiscal de la República que emplee la mano de hierro» contra las ocupaciones de edificios, comentó, para advertir que se emprenderán los desalojos debido a la «peligrosidad social» de estos casos de ocupaciones ilegales.
Este jueves, la policía detuvo a dos senegaleses por su presunta implicación en la violación y el asesinato de la chica italiana de 16 años en Roma. Los detenidos son dos ciudadanos de origen senegalés, de 26 y 43 años, sin documentos legales para residir en Italia, y según los investigadores, junto con otras personas «suministraron sustancias estupefacientes a la menor que quedó inconsciente y abusaron sexualmente de ella, causándole la muerte en la noche del 19 de octubre. Según los medios italianos, otra persona ha sido llevada a la comisaría también presuntamente por su implicación en el caso.
El cadáver de la menor fue encontrado tras el aviso de otro ciudadano senegalés, que llamó a la policía alertando de la existencia de una joven muerta en un edificio ocupado y de que un grupo de personas había abusado de ellas, según dichos medios.