Se trata de un "zonkey", un híbrido de estas dos especies, con el cuerpo grisáceo-rojizo y las patas rayadas
En medio de la pandemia y con la atención totalmente centrada en otros aspectos en el orden mundial, un peculiar nacimiento tuvo lugar en una reserva nacional de Kenia. Dieron la bienvenida a un «zonkey», una cría de burro y cebra que tiene el cuerpo grisáceo-rojizo y las patas rayadas.
La llegada del animal fue en el parque Chyulu Hills, en el sureste de país. «Un ‘zonkey’ (mezcla de las palabras inglesas zebra -cebra- y donkey -burro-) es un híbrido muy inusual entre una cebra y un burro», explicaron desde Sheldrick Wildlife Trust (SWT), una organización que trabaja en la conservación de los animales y que está haciendo seguimiento del caso.
La madre de este pequeño es una cebra. Según revelaron, en 2019 se había instalado en un coto privado y estaba conviviendo con animales domésticos y de pastoreo, hasta que las autoridades se enteraron de la situación y fue llevada al parque por el Servicio de Conservación de la Fauna de Kenia (KWS) y la SWT. Su adaptación fue controlada por estas organizaciones y en un momento notaron que estaba preñada. Cuando parió, el potro no era como los demás.
«Mientras los potros de cebra nacen con rayas blancas y marrones, que acaban volviéndose negras, este pequeño tenía sospechosamente pocas rayas y un color abrumandamente rojo», explicó la SWT en un comunicado. Los especialistas creyeron en primer momento que podía ser un cambio de color por haber estado en el barro. Pero finalmente descubrieron que es un «zonkey», su padre es un burro que habría preñado a la cebra en el hábitat anterior.
Tanto la madre como la cría están bien de salud. Los especialistas manifestaron que el pequeño podrá tener una vida totalmente normal, aunque será estéril, como las mulas.