El Reino Unido entró en una cuarentena total en diciembre pasado con el cierre de escuelas y tiendas no esenciales, para contener la segunda ola del coronavirus
El primer ministro Boris Johnson dijo hoy que están evaluando la posibilidad de que se flexibilicen en Inglaterra algunas medidas de la cuarentena a mediados de febrero, pero no garantizó la reapertura de las escuelas.
El Reino Unido entró en una cuarentena total en diciembre pasado con el cierre de escuelas y tiendas no esenciales, para contener la propagación del coronavirus que se agravó con la variante de la cepa británica.
«Vamos a ver adónde llegamos el 15 de febrero. Donde, como saben, esperamos haber vacunado a 15 millones de personas en todo el Reino Unido», aseguró Johnson esta mañana en un centro de vacunación en el norte de Londres, según consignaron los principales medios británicos.
«Obviamente, las escuelas serán una prioridad, pero no creo que nadie quiera que las restricciones se levanten tan rápidamente, mientras que la tasa de infección sigue siendo muy alta como para conducir a otra gran propagación de la infección», agregó.
Dijo que entiende totalmente las frustraciones de los padres y agradeció a los maestros por los inmensos esfuerzos para enseñar a los niños de forma online.
Según el premier británico ahora Inglaterra tiene el ratio de contagio por debajo de 1, lo que es un gran logro, pero no quiere ver un gran aumento de casos justo cuando el programa de vacunación va tan bien, por lo que están analizando los datos y tratando de averiguar cuándo se podrán levantar las restricciones.
Se estima que las escuelas que han estado cerradas con clases online para la mayoría de los alumnos desde el 5 de enero no reabrirían antes de Semana Santa.
Sólo los hijos de trabajadores clave y los niños considerados vulnerables, pueden ir a la escuela todos los días, esto incluye a aquellos que no tienen acceso a una computadora portátil o un lugar tranquilo para estudiar.
Johnson está bajo una enorme presión por parte de sus propios parlamentarios para reabrir escuelas en Inglaterra, en medio de advertencias de que los niños se han convertido en las «víctimas olvidadas» de la pandemia de coronavirus.
Por otro lado el premier agregó también que los ministros están considerando exigir que los viajeros que lleguen al Reino Unido sean puestos en cuarentena en hoteles.
Según las últimas cifras oficiales, el Reino Unido registró ayer 610 nuevas muertes por coronavirus, respecto a las 1.348 informadas el sábado, alcanzando un total de 97.939 fallecimientos así como otros 30.004 contagios.
Mientras tanto, las vacunaciones contra el virus alcanzaron esta semana casi las 500.000 dosis diarias.