Por Carlos Duclos
El reconocimiento, los homenajes a aquellos hombres que han aportado a la sociedad iniciativas y ejecuciones que han sido de beneficio para ella, no pueden estar salpicados por la pasión. La imparcialidad y la justicia es lo que debe prevalecer en estos casos. Por eso Con la Gente Medios, en el desgraciado marco de una pandemia que tiene bastante sojuzgada a la salud de la humanidad, ha querido recordar a un político santafesino quien, desde el inicio de su carrera, y especialmente cuando fuera secretario de Salud Pública en la Municipalidad de Rosario, puso a Rosario primero y a toda la provincia después, a la vanguardia de la salud pública argentina. Nos estamos refiriendo, claro está, al doctor Hermes Binner.
La obra de Binner como secretario de Salud en Rosario primero, como intendente luego y finalmente como gobernador de la provincia de Santa Fe, debe ser rescatada y valorada; es la obra propia de un estadista, pero sobre todo de un ser humano que supo ver no solo su presente, sino más allá de su tiempo. En esto podría parafrasearse al propio padre de la medicina, Hipócrates quien decía que “administrará mejor el remedio el que haya previsto lo que sucederá a partir del estado actual del cuerpo”.
A partir de la obra de Binner, la salud pública santafesina ha sido tomada como modelo no solo en nuestro país, sino en diversas partes del mundo. Una obra que desde luego continuó el Frente Progresista a través de las sucesivas gestiones que sobrevinieron. Es lícito y hasta necesario en el marco democrático discrepar en este caso con las políticas del socialismo en determinados aspectos, pero no es justo dejar de ponderar aquellas acciones que han sido determinantes para la población, como la salud. La salud, nada más y nada menos.
Acciones que, cabe recordar, se llevaron a efecto y se concretaron a veces en medio de crisis económicas del país, y cuando el gobierno federal retaceó y hasta no hizo entrega de la coparticipación federal correspondiente a la provincia. En este último aspecto, cabe recordar que fue el propio Binner quien, como gobernador en el año 2009, acudió a la Corte Suprema de Justicia para reclamar el pago de 4.000 millones de pesos, deuda que actualizada a la fecha es una verdadera fortuna.
Construcción de hospitales; equipamiento; una gran inversión en el laboratorio provincial, donde se producen medicamentos; descentralización de la salud con la construcción y equipamiento de dispensarios; campañas, son apenas una parte de lo realizado en materia de salud pública en Santa Fe. Y la pregunta, aunque pueda no ser simpática, merece que se formule: ¿qué hubiera sido de la población santafesina en estas circunstancias sin el aporte a la salud que hizo Hermes Binner?
Hoy, el ex intendente, ex gobernador y ex legislador nacional y referente del socialismo nacional, está obligadamente retirado en un hostal para adultos en la ciudad de Casilda. El destino, que suele ser osado e injusto, lo puso a Binner fuera de juego, tempranamente puede decirse. Aquello por lo que luchó, la buena salud, paradójicamente se ausentó de su vida cuando aún tenía mucho por hacer desde la política argentina en favor de la sociedad.
Especialmente en estas instancias por las que atraviesa la sociedad en materia de salud, el reconocimiento a la labor de este político santafesino, un impulsor de la mejora en materia de salud pública, es absolutamente justo.