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Gremio de peones de taxis denuncia que más del 60% de los choferes está precarizado


El Sindicato de Peones de Taxis le propuso al Municipio que en el galpón del Centro de Inspección Técnica de Automotores se fiscalicen recibos de sueldo de conductores

Las máximas autoridades del Sindicato de Peones de Taxis se reunieron este viernes con la secretaria de Control y Convivencia de la Municipalidad de Rosario, Carolina Labayru, y con el Director de Fiscalización de Transporte de Rosario, Claudio Rosa, con el objetivo de que el constante reclamo del sector para atacar la «informalidad laboral” se convierta en un eficaz mecanismo de control.

El gremio que representa a los trabajadores y trabajadoras taxistas viene elevando desde comienzos de la pandemia un proyecto que involucra a Servicios Públicos del Municipio y al Ministerio de Trabajo de la provincia de Santa Fe, y tiene la expectativa de que este último cónclave represente la puesta en marcha de la iniciativa: que en el galpón del Centro de Inspección Técnica de Automotores (CITA) se fiscalicen los recibos de sueldo de los/las choferes.

Esta propuesta del SPT apunta al corazón de la principal problemática de la actividad: en Rosario hay unos cuatro mil choferes taxistas, del cual en la actualidad sólo el 20% está anotado por 8 horas, el 50% está registrado por sólo 4 horas; y un 30% lo está como cubre franco. Estos números dejan en claro la inconsistencia de toda política oficial dirigida a terminar la irregularidad e ilegalidad laboral y la desprotección de los/las trabajadores/as del rubro, muchas veces sin obra social y sin respuesta de las ART. En ese sentido, “más del 60 por ciento de los trabajadores está mal anotado”, según baraja el STP.

Los dirigentes del gremio de choferes taxistas calificaron este nuevo acercamiento con los funcionarios municipales como un «primer gran paso» para inaugurar este dispositivo de detección de trabajo en negro y evasión de parte de los titulares. Tal como explicó el secretario general del SPT, el punto fuerte de asignarle al Centro de Inspección Técnica de Automotores esta nueva función de fiscalización es que se tornaría ineludible para los titulares de licencias, ya que sería un requisito para efectuar la desinfección del vehículo y llevarse completa la inspección técnica.

Para la conducción del Sindicato de Peones de Taxis resulta inaceptable esta vulneración de derechos de los trabajadores y trabajadoras de este servicio público, sin embargo valora muy positivamente la voluntad política de recoger este pedido. La coordinación entre la autoridad competente para autorizar y renovar licencias de taxis (Municipio) y la cartera de Trabajo provincial -con la presencia de algunos funcionarios especializados en el galpón de Servicios Públicos- permitirá erradicar definitivamente las omisiones de los derechos laborales y los abusos contra los y las choferes de taxis.