El cannabis terapéutico estará autorizado en Reino Unido con prescripción médica a partir del 1 de noviembre, anunció este jueves el ministro del Interior, Sajid Javid.
La medida se aplicará en Inglaterra, Gales y Escocia, precisó el ministro británico en un comunicado en el que subrayó que, con ella, no se abre la vía a una legalización del cannabis con fines recreativos.
«Mi intención siempre ha sido asegurar que los pacientes puedan acceder al tratamiento médico más apropiado», explicó. Pero «siempre indiqué claramente que no tengo ninguna intención de legalizar el uso recreativo del cannabis».
Varios casos de personas enfermas que se tratan ilegalmente con ayuda de productos derivados del cannabis –entre ellos los de dos niños que padecen epilepsia, Alfie Dingley y Billy Caldwell, quienes consumen aceite de cannabis– se mediatizaron en los últimos tiempos, alimentando el debate sobre la autorización del cannabis terapéutico.
Sajid Javid había pedido en junio a dos grupos de expertos independientes que estudiaran la cuestión.
Un primer análisis, dirigido por la consejera médica en jefe del gobierno, Sally Davies, concluyó que estaba demostrado que el cannabis médico tiene intereses terapéuticos.
El Consejo Consultivo sobre el Abuso de Droga, por su parte, estimó que los médicos deben tener la capacidad de prescribir cannabis terapéutico con la condición de que los productos respondan a las normas de seguridad.
El interés del uso del cannabis como planta medicinal se relanzó en la década de 1990.
Desde entonces, decenas de estudios confirmaron el interés del cannabis terapéutico, para tratar, por ejemplo, los espasmos musculares de la esclerosis múltiple y de la epilepsia, los dolores crónicos de algunas patologías neurológicas o para prevenir las nauseas y vómitos de las personas con cáncer.