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Gómez Alcorta aseguró que el único delito que no bajó por la pandemia son los femicidios


La ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad aseguró que: "Los femicidios se mantienen estable cuando los delitos en general han bajado durante el aislamiento"

 

La ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, remarcó hoy que «durante la cuarentena los delitos en general ha bajado pero los femicidios se han mantenido».

«Los femicidios se mantienen estable cuando los delitos en general han bajado durante el aislamiento. El único que se ha mantenido es el de las víctimas de femicidios», expresó Gómez Alcorta.

En ese sentido, en diálogo con Radio 10, indicó que desde su cartera están «difundiendo diferentes canales para que quienes sufren violencia de género puedan denunciarlo».

«Tenemos un déficit estructural en las autoridades que intervienen en este tipo de cuestiones, y eso con las cuarentena se agrava», sostuvo.

En mayo del año pasado se presentó, en el Congreso Nacional, un proyecto que propone declarar la emergencia en materia social por violencia de género por dos años en todo el territorio nacional, algo que volvieron a pedir en las últimas horas.

La iniciativa tiene estado parlamentario y fue firmada, entre otras, en el 2019 por las legisladoras (en ese momento) Lucila De Ponti, Mónica Macha, Cristina Álvarez Rodríguez, Victoria Donda, Vanesa Silley, Cecilia Moreau, Mayra Mendoza, Araceli Ferreyra, Gabriela Cerruti y Alejandra Rodenas.

Desde el 20 de marzo pasado, día en el que arrancó la cuarentena obligatoria dispuesta por el Gobierno nacional para intentar frenar la pandemia de coronavirus, y hasta el jueves pasado hubo 21 femicidios en todo el país, según informó el Observatorio de Femicidios «Adriana Marisel Zambrano», que es coordinado por la ASociación Civil «La Casa del encuentro».

Entre las víctimas hay desde un bebé de dos meses hasta una mujer de 53 años y en doce de los casos existía un vínculo de pareja con el femicida.

De las 21 mujeres asesinadas, cuatro fueron matadas a golpes, seis a puñaladas, dos ahorcadas, tres prendidas fuego, dos baleadas y una estrangulada, entre otras.

Asimismo, a ocho de ellas las atacaron en sus propias casas, cinco en la vivienda que compartían con el femicida, dos en la vía pública, una fue encontrada en un acantilado y otra fue asesinada en un calabozo.