La policía terminó interviniendo ya que la movilización no fue autorizada por las autoridades de París
Cientos de sin papeles salieron este sábado a las calles de París para pedir de forma masiva su regularización a través de una protesta impulsada por más de 190 asociaciones humanitarias y de derechos civiles, que reclaman también el cierre de los centros de internamiento de extranjeros.
Su marcha comenzó en las céntricas plazas de Madeleine y de Ópera y finalizó en la de la República, donde las fuerzas del orden, que rodearon todos los accesos, la acabaron disolviendo con gases lacrimógenos.
“Todo lo que queremos son papeles para trabajar”, contó a EFE Oumar, maliense de 34 años que llegó a la capital francesa hace diez y que desde entonces ha trabajado “unas veces sí y otras no” en la construcción.
Como él, tampoco tiene su situación regularizada Samba, senegalés que llegó a Francia en febrero tras haber alcanzado la costa española en patera y que todavía no habla bien francés. En su país trabajaba en la agricultura y en París, añade, todavía no ha encontrado un empleo y duerme en la calle.
“Para ese colectivo, la crisis sanitaria actual se está convirtiendo en una verdadera bomba sanitaria”, indican los organizadores en su convocatoria, que se mantuvo a pesar de no haber sido autorizada por la Prefectura de Policía.
Su llamamiento recalca que la única forma de mitigar el problema es su regularización “incondicional”, la distribución masivas de mascarillas, guantes y gel en los albergues o el aislamiento de las personas contagiadas con coronavirus “en lugares decentes”.
Fuente: La Vanguardia