Delegados del chavismo y el antichavismo mostraron “disposición de avanzar en la búsqueda de una solución acordada y constitucional” en Venezuela, informó el gobierno de Noruega al concluir este miércoles en Oslo la segunda ronda del diálogo que está facilitando entre los sectores en pugna en el país caribeño.
“Las partes han mostrado su disposición de avanzar en la búsqueda de una solución acordada y constitucional para el país, que incluye los temas políticos, económicos y electorales”, dice un breve comunicado de la cancillería noruega, divulgado este miércoles por la tarde.
El documento subraya que, con el objeto de “preservar el proceso que permita llegar a resultados, se solicita a las partes tomar la máxima precaución respecto a la reserva del mismo, tanto en sus comentarios como en sus declaraciones”.
Entre el lunes y hoy, representantes del chavismo y el antichavismo conversaron con autoridades de la cancillería de Noruega en el segundo ciclo de la negociación iniciada hace dos semanas, también en Oslo. Las partes procuran un acuerdo en torno de la posibilidad de realizar elecciones presidenciales libres y con observación internacional, según revelaron fuentes de la negociación en los últimos días.
Esa iniciativa busca un punto intermedio entre el rechazo del chavismo a dejar la Presidencia y el del antichavismo a que los comicios transparentes sean consecuencia del cese de la administración del presidente Nicolás Maduro y de un gobierno de transición.
Por otra parte, representantes del Grupo Internacional de Contacto (GIC) que lidera la Unión Europea (UE) y del Grupo de Lima -que integra la Argentina- se encontrarán por primera vez el 3 de junio próximo en Nueva York, para explorar acciones comunes en la búsqueda de una solución a la crisis venezolana.
De ese encuentro participarán la canciller de la UE, Federica Mogherini y los ministros de Relaciones Exteriores de Portugal y Uruguay -por el GIC-, así como los de Canadá, Chile y Perú, por el Grupo de Lima, anunció hoy el Servicio Europeo de Acción Exterior, según reportó la agencia EFE.
En sus últimas reuniones, a comienzos de este mes en Lima y San José (Costa Rica), respectivamente, el Grupo de Lima y el GIC se manifestaron dispuestos a trabajar de manera conjunta en la búsqueda de una solución democrática y pacífica para Venezuela.
El GIC está integrado por Alemania, Bolivia, Costa Rica, Ecuador, España, Francia, Holanda, Italia, Portugal, el Reino Unido, Suecia y Uruguay, aunque Bolivia -aliado histórico del chavismo- no firmó ninguna de sus resoluciones.
Hasta que se reveló la mediación de Noruega, el GIC era considerado como la única instancia con acceso a todos los actores claves de la crisis venezolana.
En tanto, el Grupo de Lima, fundado en 2017, está conformado por la Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú y la propia Venezuela, con una representación diplomática designada por el presidente interino nombrado por el parlamento, Juan Guaidó.