Política y Economía

Fernández: «Quien irrumpa la cuarentena quedará en curso de un delito penal»


El presidente habló sobre el avance del coronavirus en la Argentina y criticó la suba en el precio del alcohol en gel

El presidente Alberto Fernández advirtió este jueves que la propagación local del coronavirus «va a pasar» en la Argentina y remarcó que «la situación está bajo control, porque están ocurriendo las cosas que se esperaban», a la vez que ratificó que aquellos que rompan la cuarentena «van a ser denunciados inmediatamente ante la Justicia Federal».

«Hasta acá no hemos detectado el traslado social del virus. Pero eso no quiere decir que no lo detectemos pronto. Va a pasar acá, por eso tenemos que estar muy atentos y les pido mucha responsabilidad a los que regresan del exterior. Es muy importante la responsabilidad individual», sostuvo el mandatario, quien afirmó que «el gobierno atendió desde la hora cero este problema». E insistió: «Estamos haciendo todo, pero si no contamos con la responsabilidad es cada uno, estamos en un problema, porque el riesgo es exponencial».

En diálogo con Radio Mitre, el jefe de Estado señaló que el gobierno está «haciendo un seguimiento con toda la gente que está en cuarentena», proveniente de países donde circula el Covid-19.

«La gente llega, sabemos quién llega, a dónde está y cuidamos su reclusión domiciliaria hasta tanto pase el riesgo. La gente que viole eso va a ser inmediatamente denunciada ante la Justicia Penal porque realmente está aumentando el riesgo en la salud público, poniendo la posibilidad de que un virus trascienda en la sociedad», remarcó Alberto Fernández.

De todos modos, afirmó que «la situación está bajo control», ya que señaló que «están ocurriendo las cosas que se esperaban». «Pero no sabemos hasta dónde podemos llegar», alertó, para luego volver a pedir la «responsabilidad individual». Y añadió: «Apelamos a la responsabilidad, pero nos encontramos con un señor que pasó seis días a trabajar con fiebre. Entonces pasamos del pedido voluntaria a la obligación, bajo amenaza de que si uno vulnera la cuarentena, quedará en curso un delito penal, el de propagar una epidemia».

A la vez, el presidente cuestionó la «canallada» del aumento en el precio del alcohol en gel y los barbijos: «Estamos buscando que nadie especule con esto. Habla de la poca responsabilidad de algunos empresarios nuestros. Por eso, estamos garantizando el precio del producto y el suministro, para que nadie acopie maliciosamente».

El mandatario destacó que el coronavirus «es un tema que si se lo trata con seriedad, se lo puede controlar» y subrayó que la enfermedad «tiene una baja capacidad para causar la muerte» sobre la mayor parte de la población.

Asimismo, indicó que «por ahora no» está prevista la suspensión de las clases, ya que los chicos tienen «los niveles de más bajo riesgo».

Por otra parte, Alberto Fernández contó que habló telefónicamente con los mandatarios de España, Pedro Sánchez, y de Italia, Giuseppe Conte, así como también envió notas oficiales a la canciller alemana, Angela Merkel, y al presidente francés, Emmanuel Macron: «Lo que hice fue transmitirles mi salubridad, mi afecto y mi deseo de ayudarlos en cuanto esté a mi alcance, aunque sé que poco puedo hacer».