Desde hace mucho, cada 30 de octubre es una fecha especial: en ese día, pero de 1960, nació Diego Armando Maradona, ícono y referente del fútbol argentino y uno de los mejores jugadores de la historia. En este caso, el cumpleaños número 59 del ex capitán de la selección argentina, campeón del mundo en México en el año 1986, tiene un condimento especial, porque después de mucho tiempo regresó al fútbol argentino, ahora como entrenador de Gimnasia y Esgrima de La Plata.
En las horas previas a su cumpleaños sus propios dirigidos le ofrecieron un gran regalo: vencieron por 4-0 a Newell’s, en Rosario, donde también recibió un gran homenaje, por haber vestido aquella camiseta en 1993.
Su debut en la Primera División argentina se produjo el 20 de octubre de 1976, a los 15 años de edad, por un partido del Campeonato Metropolitano, oportunidad en que su equipo Argentinos Juniors perdió ante Talleres por 1:0 de local. Al mes siguiente, el 14 de noviembre, convirtió su primer gol en un partido frente a San Lorenzo de Mar del Plata.
En 1981 Maradona quería ser transferido a Boca Juniors, un club que pasaba por una mala situación económica y no se encontraba en condiciones de comprar su pase. Finalmente fue cedido a préstamo por un año y medio a Boca, club que se reservaba la opción de compra.
El contrato se firmó el 20 de febrero y debutó dos días después, nuevamente frente a Talleres. A diferencia de su debut con Argentinos, esta vez se desquitó y, con dos goles suyos, Boca superó a su rival por 4:1.
Tras su participación en la Copa Mundial de Fútbol de 1982, se oficializó la venta al Fútbol Club Barcelona. El club pagó 1.200 millones de pesetas por su pase, aproximadamente el 66% del dinero fue para Argentinos y el resto para Boca Juniors, una cifra importante para la época.
Abandonó el FC Barcelona habiendo jugado un total de 58 partidos y marcado 38 goles y fue traspasado al Napolí de Italia, y su presentación allí fue el 5 de julio de 1984, ante un estadio San Paolo repleto.
Tras el Mundial de 1982 se produjeron varios cambios en la selección argentina. El más importante fue el cambio de la dirección técnica, ya que Carlos Salvador Bilardo había reemplazado a Menotti. Las malas actuaciones durante los partidos de preparación de cara al mundial de México 86 no generaban entusiasmo en los hinchas argentinos. Sin embargo, tras grandes actuaciones, entre ellas venciendo a Inglaterra por los cuartos de final, con aquellos goles inolvidables, lograron seguir avanzando hasta llegar a la final, en la cual con una victoria sobre Alemania por 3:2 Argentina conseguía su segunda Copa del Mundo, y Maradona, como capitán, fue el encargado de levantar la copa.
Al regresar del Mundial en México, Maradona inició una excelente temporada con el Nápoles. En esa temporada consiguieron el primer scudetto de la historia de la institución, y además ganaron la Copa de Italia.
Tras el Mundial de México, la selección argentina no había podido mantener la supremacía futbolística. En la Copa América de 1987 había obtenido el cuarto puesto, mientras que en la de 1989 quedó en tercer lugar. A pesar de esto, la selección había arribado al centro de entrenamiento que utilizaría como base en la Copa Mundial de Fútbol de 1990 en Italia, ubicado en las afueras de Roma, con la intención de repetir la actuación anterior. Otra vez en una final con Alemania, el conjunto argentino no pudo y terminó siendo subcampeón.
Posteriormente, Maradona fichó por el Sevilla FC debido a la insistencia del entrenador argentino Carlos Bilardo, entonces entrenador del conjunto sevillano en 1992.
En 1993 se produjo su vuelta al fútbol argentino, esta vez con la camiseta de Newell’s Old Boys.
Maradona debió cumplir los 15 meses de suspensión impuestos por la FIFA durante el Mundial de 1994, luego de que se le detectara sustancias estimulantes en un control antidopaje.
Una vez firmado el contrato que sellaba su regreso a Boca, Maradona comenzó a ponerse en forma para el día del debut en 1995.
En 1997, en un partido que Boca Juniors derrotó como visitante a River Plate por 2:1, sería su último partido oficial, ya que anunció su retiro del fútbol profesional el mismo día de su cumpleaños número 37, el 30 de octubre.