La autoridad migratoria de Estados Unidos informó este lunes que detuvo a 42 inmigrantes que entraron por la fuerza a su territorio a través del puente que une San Diego con la ciudad mexicana Tijuana, a los que acusó de atacar a oficiales norteamericanos.
Mientras tanto, el presidente Donald Trump volvió a reclamar al gobierno mexicano que devuelva a los migrantes de la caravana que partió de Honduras y al Congreso de su país que financie el muro que pretende construir en la frontera con México.
Los arrestos fueron anunciados por Rodney Scott, jefe de sector de la Patrulla Fronteriza en San Diego, en declaraciones a la televisora CNN citadas por la agencia de noticias EFE.
Scott describió que los inmigrantes fueron detenidos ayer en territorio estadounidense, luego de que cruzaran por la fuerza el puesto San Ysidro, en el límite que separa a San Diego de Tijuana. De acuerdo con ese relato, los 42 capturados formaban parte de un grupo de centenares de migrantes -la mayoría, centroamericanos- que realizaron una manifestación en territorio mexicano.
Según Scott, los migrantes atacaron con piedras a oficiales que custodiaban el muro que divide a ambos países en la zona de San Ysidro y que respondieron lanzando gases lacrimógenos.
El funcionario dijo asimismo que los migrantes rompieron un cerco de la Policía Federal mexicana en el afán de traspasar la frontera. “Al principio teníamos dos o tres agentes enfrentando a cientos de personas, así que los agentes utilizaron el gas para protegerse y proteger la frontera”, sostuvo Scott.
En tanto, Trump afirmó que “México debe devolver a los migrantes, muchos de los cuales son fríos criminales, a sus países”.
“Háganlo por avión, háganlo en ómnibus, háganlo como quieran, pero NO van a entrar en Estados Unidos”, advirtió el jefe de la Casa Blanca a través de Twitter.
“Cerraremos la frontera permanentemente si necesitamos hacerlo; Congreso, ¡financia el muro!”, agregó el mandatario.
En Tijuana hay más de 4.700 migrantes centroamericanos y se espera la llegada de otros para los próximos días, indicó la agencia DPA.
La mayoría de ellos procede de Honduras, Guatemala y El Salvador, y llegaron a Tijuana en caravanas que partieron el mes pasado de Honduras con el objeto de llegar a Estados Unidos y pedir asilo allí.