Por Enrique Genovar
Gil y Zampedri, dos de los campeones de la Copa que quedaban en el plantel, buscarán nuevos aires. La mayoría de los hinchas está de acuerdo
Por Enrique Genovar
Las idas de Leonardo Gil y de Fernando Zampedri no hacen más que evidenciar el fin en el club de dos jugadores que quedarán en la historia por haber sido parte del plantel que logró el campeonato de la Copa Argentina. Pero también marca a las claras que los procesos de los jugadores se terminan.
Si bien las salidas de estos es diferente, porque uno se va por una venta y el otro por un préstamo, evidencia que el ciclo de ambos estaba finiquitado.
Claro que su estadía se terminó por diferentes motivos, como pasa siempre en el fútbol. Gil terminó siendo titular con Diego Cocca. El Colorado, más allá de que no volvió a mostrar esa buena pegada que tiene y que tanto le dio rédito a Central, estuvo dentro de los once por ser un jugador “obediente” para los entrenadores. En especial para el actual, ya que a pesar de que no pesaba en la tarea del armado de juego era imprescindible a la hora de hacer la tarea en cada estrategia que el DT planteaba para cada uno de los partidos.
Gil se va y ninguno de los hinchas canallas pondrá el grito en el cielo porque ellos, los simpatizantes, son los primeros jueces que sentencian a si un ciclo está finiquitado o no.
El caso de Zampedri es un poco más polémico. El Toro se quiso ir a principio de año a Independiente y su transferencia no se dio. Luego jugó poco por su dolencia en el tobillo y después vino la operación que lo sacó definitivamente del campo de juego por todo el 2019. Sin embargo, en plena rehabilitación, tuvo un gesto que para muchos canallas fue de traición: posó en una foto que luego subió a una red social con la camiseta de River. Más allá de que luego pidió disculpas, la misma no tuvo éxito en los ya dolidos canallas.
Sin embargo la salida del Toro tiene algunos detractores. Es que en junio próximo finalizan los contratos de Ruben, Ribas y Riaño; y como el préstamo es por un año, el plantel corre el riesgo de quedarse sin centrodelantero para encarar el segundo semestre.
Los ciclos se terminan y no hay dudas de que para la mayoría la estadía de Gil y Zampedri en Central estaba terminada.